Páginas

martes, 9 de agosto de 2011

PUEBLO INGLÉS EN LA CALLE EN PROTESTA CONTRA ATROPELLOS POLICIALES Y LA CRISIS ECONÓMICA QUE LOS ACOGOTA

Por: FARRBAU

Como un buen asesino que es, Cameron, el mismo que mandó a asesinar a los Libios en compañía de sus congéneres Obama y Sarkozy,--hoy mismo acaban de asesinar con sus bombardeos a 85 libios-- , esa especie de atildado Margaret Thatcher con pantalones Cameron, promete que va a restaurar el orden en las ciudades inglesas, que llegan a doce, donde hay disturbios en protesta por el asesinato por la policía de un ciudadano inocente, Mark Dugghan y que no actuó en ningún hecho criminal y fué asesinado vilmente por las fuerzas policiales en Tottengham, Londres.

Aparte de Londres las protestas tienen grandes dimensiones en ciudades como Manchester, Bristol, Nottigham, Birminghan, Liverpool, y otras, hasta doce hasta ahora, en protestas directas en las calles, y se dan otros tipos de protestas en reuniones, asambleas de colectivos de la población, llamadas de protestas a programas de Radio y TV y otras, en todo el resto de Inglaterra.

La situación de Inglaterra, todavía oculta en cierto sentido en cuanto al deterioro de las condiciones de vida en el País, no es desconocida ni extraña. En meses anteriores se presentaron protestas de distintos tipos, en cuanto a la precarización de las condiciones de trabajao en todas las ramas de la industrias y los servicios, que traen como consecuencia rebajas de salarios, despidos, eliminación de la contratación colectiva y pase a la contratación individual impuesta por el patronazgo capitalista para dar trabajo, o no lo hay.

Síntomas de la crisis del capitalismo de la cual no se salva Inglatera. La protesta anterior, conducida formalmente por los sindicatos, a la cual se sumó una sustancial parte de la clase obrera inglesa, de los trabajadores de los servicios, y que incorporó a más de cuatro millones de trabajadores en huelga, y en añadido una cantidad similar en reuniones de protestas, asambleas, recorridos de calle y otras formas de participación contra las condicioines impuestas por el capitalismo, y reforzadas con el gobierno conservador guerrerista derechista tirando a fascista de Cameron.

Nadie duda de que Cameron acudirá a la violencia, ya lo anunció, pero esto seguramente lo que hará será radicalizar las protestas y poner de bulto la crisis que tratan de ocultar, no sólo la crisis económica, sino la social y la política, con la actuación de un gobierno de corte fascista y cuyos anuncios indican que no parece diferenciar entre Libia e Inglaterra.

Los disturbios, los más grandes en años, desde la época de la Thatcher, han sido provocados en un barril de pólvora como es la sociedad inglesa actual, por la chispa de la represión policial, que se da día tras día, pero que acaba de llegar al colmo. En vez de palos, esta vez fueron balas y una vida segada injustamente y sin motivo, y la indignación acumulada reventó.

Ahora, el esquema de luchas de la clase obrera y el pueblo inglés se radicaliza, contra el gobierno de la realeza imperialista que trata de paralizar por la fuerza el inmenso caudal de luchas que representa el pueblo inglés, que, al igual que otros pueblos de Europa, no están de acuerdo con pagar la crisis ocasionada por el capitalismo.

No se trata de lo que dicen los gobernantes ingleses arrechos porque los sacaron de sus vacaciones de playa en el Mediterráneo gozando del dinero que le arrebatan a la población inglesa, de que son bandidos y delincuentes quienes están en la calle protestando, no. Se trata de la crisis que está brotando, y fuertemente, en Inglaterra. Y ninguna medida de violencia la va a parar, porque está en la estructura misma de la sociedad inglesa.




Fuente: PrensaPopularSolidaria



EN PELIGRO LA COHESIÓN EN ISRAEL

Por: Jorge Gómez Barata

Israel, eje del más dilatado, complejo y peligroso conflicto político de la actualidad, uno de los tres grandes contenciosos que han sobrevivido a la Guerra Fría, es también la sociedad más compleja, el país más dependiente del apoyo externo y el lugar donde la fe desempeña un papel más relevante. Sin importar las bombas atómicas y los soldados que posea, Israel es rehén de delicados equilibrios internos cuya ruptura no puede permitirse.

Más allá de las analogías que el debut de los llamados "indignados" en Israel establecen respecto a los demás países del Medio Oriente, sacudidos por oleadas de protestas populares; se trata del aviso de lo que puede constituir un cambio cualitativo en el comportamiento de la sociedad israelí, uno de los dos estados teocráticos del mundo y el único de la región que no es árabe, persa ni musulmán.

Israel que no es una nación, tampoco un Estado formado como resultado de la evolución histórica, sino un conglomerado humano multiétnico, racial, culturalmente y lingüísticamente diverso cuya unidad no es resultado de vínculos económicos y culturales históricamente forjados, sino de la identidad emanada de una fe compartida. Tales peculiaridades lo obligan a preservar la cohesión social de lo cual dependen, no sólo el orden y la estabilidad, sino su existencia.

A diferencia de los demás estados/naciones de la tierra, Israel no se formó históricamente en el territorio donde radica y su población, excepto lo preceptuado por una remota leyenda bíblica, está formada en un cincuenta por ciento por emigrantes que carecen de vínculos históricos reales y de antepasados comunes.

Ningún análisis de calado estratégico puede pasar por alto que aunque se trate de una democracia liberal de corte occidental, Israel es un Estado de matriz confesional. La fe judía como todas las grandes doctrinas religiosas, aunque convive con ellas, no crea distinciones de clase ni acredita privilegios de cuna y fortuna. Una de las claves para la supervivencia del Estado judío ha sido cierta coherencia entre los preceptos de la fe y las políticas sociales.

No obstante, como en todas las sociedades avanzadas, en Israel es fuerte la tendencia a la secularización que no omite la religiosidad aunque la reserva a ejercicios propios de la espiritualidad. Dar de comer a los hijos y proporcionar techo a la familia, no es un asunto de la fe, sino una conquista económica. En Israel donde también existen la codicia y la pobreza, los más desfavorecidos o los perjudicados por las políticas gubernamentales, acuden a las protestas que suelen comenzar por reivindicaciones elementales y desplazarse a terrenos más complejos, especialmente políticos, cosa que es allí más delicado que en cualquier otro lugar.

Tampoco puede omitirse el hecho de que Israel es parte de la economía mundial y que a pesar de los fuertes subsidios sobre todo de Estados Unidos que, por medio de asistencia, préstamos y otras operaciones económicas asume los enormes gastos militares del Estado judío, a su interior se manifiestan también las tensiones derivadas de la crisis que, de un modo u otro afecta a todos los países.

A todas estas, el descontento y las protestas llegan en un momento de fuertes tensiones asociadas a la inminencia de la proclamación del Estado Palestino que puede incluso ser admitido en la ONU. Con semejante status, Palestina pudiera desplegar una actividad internacional, incluso concertar acuerdos que estrechen el margen de maniobras del sionismo. El gobierno israelí no parece tener otras alternativas que ceder al debate en torno a las fronteras palestinas.

En semejante coyuntura las elites políticas y el gobierno israelí no pueden permitirse el disenso interno que expresan las manifestaciones. La mala noticia es que los protestantes también lo saben y no dejaran de aprovechar semejante ventaja.

Desde hace 60 años se escucha hablar de los indignados con Israel; la novedad radica en que hay ahora "indignados" en Israel que no sólo se manifiestan sino que también emigran y restan el apoyo que el gobierno necesita para aplicar sus políticas.

Hasta ahora, las élites políticas sionistas se habían comportado de modo impopular y agresivo respecto a los palestinos; en lo adelante es altamente probable que lo hagan también con sus propios ciudadanos. Habituado a reprimir a otros, Israel puede hacerlo ahora contra sus propios ciudadanos. El dilema no es sencillo. Alguna vez tenía que tocarles. Allá nos vemos.

Fuente:Cuba en Noticias/Palestina Libre/PrensaPopularSolidaria
http://prensapopular-comunistasmiranda.blogspot.com/
Correo: pcvmirandasrp@gmail.com