CARTA DESDE EL RECLUSORIO DE MUJERES DE BOGOTÁ, LA OTRA CARA DE LA MONEDA QUE NADIE VE

Libertad a todos los presos políticos de Colombia
Reclusorio Nacional de Mujeres Bogota, Noviembre 28 de 2008

Compañeros sindicalistas, activistas por la paz, defensores de Derechos Humanos, académicos, dirigentes políticos, estudiantes.

Con mucha emoción y gratitud recibí aquí en la cárcel copia de sus cartas de solidaridad y de presión al gobierno colombiano para que me devuelva mi libertad.

Compañeros, la solidaridad de compañeros como Ustedes, consecuentes y defensores de los derechos humanos y de los trabajadores son un gran aliciente para mantener en alto la moral en esta condición de prisionera política y de conciencia a la que nos ha sometido este gobierno fascista de Álvaro Uribe Vélez. Son ya casi 4 meses desde el día de mi detención, del allanamiento a mi sitio de residencia y de este injusto encarcelamiento. En Colombia el nivel de persecución política y de violaciones a los Derechos Humanos es tan aberrante, que solo la presión internacional ha servido para frenar en alguna medida tanto abuso.

En estos días la Fiscalía nuevamente le negó a mi defensor mi derecho a la detención domiciliaria con el absurdo argumento de que pondría en peligro a la comunidad y a mis hijos. Por eso hoy, con mi abogado, estamos acopiando cartas de todas las personas y organizaciones que me conocieron como una luchadora por los derechos de los trabajadores, de los campesinos, de los Derechos Humanos y de la Paz con Justicia Social para mi país, y no como la fiscalía pretende mostrarme, como una “terrorista” que pone en peligro a la sociedad.

También esperamos que continúe la presión internacional exigiendo que se me respete el “debido proceso” y el derecho que como madre cabeza de familia tenemos mis hijos y yo a mi detención domiciliaria mientras se define la situación jurídica. Mi situación es sola una de entre miles de compañeros y compañeras que como yo estamos en prisión por haber sido sindicalistas, dirigentes campesinos, indígenas, de negritudes, defensores de derechos humanos, luchadores del pueblo, opositores políticos.

Somos más de 7,200 los presos políticos de quienes el mundo conoce muy poco. Esta es la otra cara del Conflicto Interno Colombiano que debe ser conocida y denunciada.

Por eso, he asumido la Campaña que por mi libertad, levantaron varios compañeros en diferentes países, no como una campaña individual sino como una oportunidad para denunciar la situación de los Presos Políticos en Colombia y buscar soluciones para todas y todos. Libertad a todos los Prisioneros Políticos en Colombia ¡Libertad a todos los Prisioneros Políticos en Colombia! Nosotros estamos levantando la bandera del Intercambio Humanitario de Prisioneros Políticos y no renunciamos a la búsqueda de una salida política al Conflicto Social y Armado Colombiano, que es la única vía para construir una Colombia mejor con Paz con Justicia Social, esperamos que Ustedes nos acompañen también en esa lucha.

Mientras Ustedes nos sigan acompañando con su solidaridad y nos sigan prestando sus voces para que se escuchen las nuestras, hoy en prisión, le habremos ganado una batalla a nuestros represores que solo buscan silenciarnos; nuestra Justa causa se mantendrá viva y nuestro sueño de una patria justa se hará mas cercana. Solidariamente,

Liliany OBANDO

Prisionera Política Comunista
Prisionera de Conciencia
Sobreviviente del Genocidio contra la Unión Patriótica