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jueves, 26 de marzo de 2009

CRIMENES DE GUERRA EN GAZA RELATAN SOLDADOS ISRAELIES

Por Pierre Barbancey

El diario Haaretz publica relatos demoledores para el ejército de ocupación, que confirman ejecuciones sumarias y vejaciones.

Tan seguro de sí mismo como acostumbra, el ministro de defensa israelí, el laborista Ehud Barak, se muestra imperturbable : “El ejército israelí es el que más respeta los principios morales en el mundo y hablo con conocimiento de causa porque conozco lo que ocurrió en la antigua Yugoslavia, lo que sucede en Afganistán o en Iraq”.

Ésa fue su reacción, ayer, a la publicación por el diario Haaretz de testimonios de soldados israelíes que aluden a asesinatos de civiles a sangre fría y actos de vandalismo perpetrados durante los 22 días que duró la ofensiva israelí en Gaza entre diciembre y enero pasados. Estos soldados, procedentes de una academia militar que lleva el nombre de Isaac Rabin, publicaron sus relatos en un boletín informativo de la citada institución.

Entre los testimonios recogidos por el diario Haaretz, así como por las radios pública y militar, figura el caso de una anciana palestina asesinada cuando caminaba a 100 metros de su casa. Otros militares hablan también de vejaciones, actos de vandalismo, y destrucción de enseres domésticos. Uno de los testimonios, procedente de un suboficial de infantería, alude a un francotirador del ejército que abatió a una madre y sus dos hijos por tomar la dirección opuesta a la indicada cuando los militares les ordenaron salir de su casa : “El comandante del batallón ordenó a la familia que salieran hacia la derecha. Una madre y sus dos hijos no entendieron la instrucción y salieron hacia la izquierda. El francotirador los vio acercarse más allá de las líneas que según sus órdenes nadie debía atravesar. Les disparó sin más”.

El mismo suboficial relató además que los hombres bajo sus órdenes consideraban que “la vida de los palestinos era mucho menos importante que la de nuestros soldados, de modo que una cosa justificaba la otra”. Otro suboficial habla de actos de vandalismo cometidos por los soldados : “Escribir “Muerte a los árabes” en las paredes, apoderarse de fotos de familia para escupir sobre ellas, simplemente porque teníamos poder para hacerlo... Lo importante de todo esto es que demuestra hasta que punto se ha deteriorado la ética del ejército israelí.”

Según el director de la academia militar, Danny Zamir, en el ejército reinaba un clima de “desprecio desmedido” y un “sentimiento de superioridad” hacia los palestinos. Asegura haber hecho llegar al estado mayor los testimonios de egresados de su institución que no habrían cometido crímenes personalmente pero que “se sienten incómodos por no haber podido impedirlos”.

Un locutor de la radio pública, Moshé Hanegbi, especialista en cuestiones jurídicas, consideró que estos testimonios “son aún más inquietantes si se tiene en cuenta que no vienen de palestinos, sino de soldados que no ganan nada empañando la reputación de sus compañeros de armas. No es el ejército quien debe abrir una investigación sobre su propio comportamiento, ya que tal investigación no sería creíble cuando se está acusando a Israel de crímenes de guerra en el extranjero y cuando hay oficiales que podrían ser procesados en distintos países del mundo”.
La ofensiva del ejército israelí contra Hamas en la franja de Gaza causó más de 1.300 muertos y 5.000 heridos palestinos, según un balance de los servicios médicos palestinos. Entre ellos figuran 437 niños menores de 16 años, 110 mujeres y 123 ancianos, así como 14 médicos y cuatro periodistas. La ofensiva de 22 días (27 de diciembre - 18 de enero) causó 1.890 heridos entre los niños y 200 heridos graves entre todos los grupos de edad. Israel lanzó la operación militar con el objetivo declarado de reducir al mínimo los lanzamientos de cohetes por parte de los grupos armados palestinos, especialmente Hamas, contra su territorio. Del lado israelí, murieron diez militares y tres civiles, según cifras oficiales. Queda por saber si los países occidentales, que habían hecho caso omiso de los testimonios estremecedores de los propios palestinos (recordemos la publicación en L’Humanité de la historia de Jaled Abed Rabbo, un padre de familia que relataba la ejecución sumaria de dos de sus hijas y cómo la tercera quedaba gravemente herida), acudirán por fin a la justicia internacional para que se cree una comisión de investigación independiente que pueda esclarecer los hechos y que, si se da el caso, puedan emprenderse acciones penales contra Israel.
Humanité en español

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