AQUEL MEMORABLE 8 DE AGOSTO

Por: Jerònimo Carrera

Para esos días del año 1937 yo estaba disfrutando de mi primera juventud, en mi encantadora Cumaná natal, y ya por cumplir mis tan inolvidables quince años. Venezuela había salido, por fin, de la larga etapa de la cruel tiranía gomecista, para entrar en la muy hipócrita democracia del post-gomecismo.

Nada de raro tuvo, entonces, el hecho de no haberme yo enterado, ni por la prensa ni la radio que hacían sus pininos democráticos, de lo que había ocurrido aquel 8 de agosto en la que todavía para nosotros los orientales era la ciudad “gomera”, Maracay.

En efecto, allí ese día se había celebrado exitosamente, dentro de la mayor clandestinidad y con la participación de representantes de siete regiones, la Primera Conferencia Nacional del naciente Partido Comunista de Venezuela.

Aunque también sea bueno aclarar que ya para ese tiempo existían, y funcionaron activamente de modo clandestino en diversas partes del país, unas cuantas organizaciones de base, o sea de las que denominamos “células”.

La primera célula del comunismo en Venezuela había sido creada en Caracas el 5 de marzo de 1931, fecha que ha sido adoptada como de la fundación del PCV. Con la participación en ella de tres cumaneses, por cierto…

Fueron ellos los primos hermanos Torres: Tomás Aquino y Tomás del Carmen, (este último felizmente está vivo en Cumaná con sus 96 años de edad y sigue siendo comunista, lo cual lo hace el comunista más antiguo que tenemos en Venezuela), siendo el tercero José Antonio Mayobre, quien desertó más tarde hacia el policlasismo propio de la pequeña burguesía y del cual se originó en 1941, timoneada por otro desertor del comunismo, Rómulo Betancourt, esa Acción Democrática que todavía subsiste por allí, arrinconada por su propia historia.

El premio que luego recibieron fue llegar a ser ministro uno y presidente de la república el otro, pero ambos de triste memoria para nuestro pueblo. Conviene tener en cuenta que ninguna otra organización política venezolana ha sido tan hostigada, en muy variadas formas pero con igual propósito de hacerla desaparecer, como la ha sido el PCV a partir de su fundación misma.

Puede decirse con certeza que tal objetivo lo han perseguido todos los gobiernos que hemos tenido aquí, sean de dictaduras o de los considerados como democráticos. Pero eso no ha impedido que miles y miles de venezolanos hayan en algún momento de sus vidas abrazado la causa comunista, y una buena cantidad de ellos lo han hecho de por vida, sin flaquear ante la represión o los halagos provenientes de esos gobiernos.

Hoy podemos señalar una breve lista de militantes muy destacados en distintas esferas de la vida nacional, que no cedieron de ninguna manera ante tales presiones, y limitándonos a camaradas ya muertos: dirigentes políticos como Gustavo Machado y Jesús Faría; sindicalistas como Cruz Villegas y Hemmy Croes; médicos como Eduardo Gallegos Mancera y Alcides Rodríguez; abogados como Ernesto Silva Tellería y Pedro Ortega Díaz; pintores como Gabriel Bracho y César Rengifo; poetas como Alí Lameda y Carlos Augusto León; profesores universitarios como Fernando Key Sánchez y Rodolfo Quintero; periodistas como Héctor Mujica y Federico Alvarez; en fin, una lista interminable con nombres de significación nacional. Y centenares de héroes y mártires, como Alberto Lovera y Livia Gouverneur.

Claro está, de esas mismas filas comunistas han salido igualmente oportunistas que “han cambiado su primogenitura por un plato de lentejas”, para decirlo en lenguaje bíblico. Son los “buscapuestos” que en un país petrolero como el nuestro son fáciles de ablandar…

Pero podemos estar seguros de que mientras haya aquí explotación de la fuerza de trabajo, bajo el gobierno que sea, habrá comunistas. Así quedó bien confirmado en Maracay aquel memorable 8 de Agosto…!

Fuente: PrensaPopularSolidaria_ComunistasMiranda (PPS_CM)

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