Por: Oscar Peña
Caracas, 14 dic. 2009, Tribuna Popular TP/Por Oscar Peña.- En un primer análisis de los resultados electorales obtenidos en las elecciones presidenciales y parlamentarias de Chile, muestran claramente el “voto castigo” que el pueblo chileno le propinó a los partidos de la Concertación por la Democracia, que llegó al poder hace 19 años prometiendo la “alegría” que nunca llegó y solo administraron la herencia dictatorial bajo el signo del neoliberalismo.
En Chile, se impuso bajo la dictadura fascista y pro-imperialista de Pinochet, el neoliberalismo más salvaje impuesto a un pueblo, sobre la base de una criminal y devastadora represión, el engendro neoliberal fue aplicado a sangre y fuego.
El pueblo chileno, a pesar de la represión, desapariciones, tortura y crímenes, supo superarse y avanzar a la conquista de la democracia que conquistó, primero el 5 de octubre de 1988 y luego la presidencia para la Concertación en diciembre del 1989, con el apoyo de todas las fuerzas democrática que lucharon contra la dictadura.
Bajo el lema “Chile, la alegría ya viene”, las fuerzas democráticas lograron derrotar a un enemigo que contaba con el apoyo de los gobiernos terroristas de Estados Unidos, como ha sido toda la historia de nuestra América.
19 años han pasado en Chile, con gobiernos de la Concertación, sin que casi nada haya cambiado para los pobres, para las y los trabajadores, al contrario, los gobiernos de esta coalición han profundizado los procesos de privatización de la economía, de la salud, de la educación, del derecho a la vivienda quitándoles a los chilenos el derecho a vivir en sus ciudades. Han marginado a los más pobres a vivir en los suburbios de la ciudad, mientras las empresas trasnacionales y los nuevos ricos se han adueñado de las zonas urbanas y las riquezas del país.
La escuálida votación obtenida por su candidato, Eduardo Frei, que ya fue presidente de Chile y que impuso un estilo de gobierno de entrega total y privatización total de la economía chilena, es una muestra del fracaso de su política. No sacaron nada con tener una mayoría en sus elecciones cuando nunca pudieron aplicar esa mayoría para producir los cambios que el país demandaba, por el contrario, gobernaron junto a la derecha, excluyendo durante todos estos años a los partidos y movimientos de izquierda.
Esta es la cuenta que le ha pasado el pueblo chileno, un claro rechazo a sus políticas del temor, de ninguna cambio de lo que había establecido la dictadura de Pinochet. No hay grandes cambios y lo que hicieron fue gobernar “en la medida de lo posible”, sin hacer enojar al amo del norte, a la derecha chilena y a los poderes facticos que son los que realmente gobiernan.
La derecha en Chile ha mantenido su votación en estos 19 años, no ha crecido, pero se ha mantenido porque era lo mismo un gobierno de la derecha o de la concertación, nada cambiaba en lo esencial, mientras que de 12 millones de posibles votantes, 4 millones de jóvenes no se quieren inscribir en los registros electorales, eso es lo que ha logrado estos partidos que han mantenido el bipartidismo que tanto daño le han hechos a nuestros pueblos.
En el futuro próximo se visualiza la posibilidad que Chile vuelva a ser gobernado por los mismos esbirros derechistas que apoyaron a Pinochet en todas sus políticas. Esto es posible, solo si la Concertación no demuestra que ha aprendido la lección y logra en estas semanas que restan para la segunda vuelta, desarrollar una propuesta de gobierno de cambios, junto a las fuerzas de izquierda que excluyeron durante años.
La izquierda puso temas vitales para avanzar en un verdadero cambio. La Asamblea Constituyente para redactar una nueva Constitución Democrática; el reconocimiento a los derechos de los pueblos indígenas, la renacionalización del cobre y la gran minería nacional, termino a la privatizaciones, terminar con el binominalismo en las elecciones populares, una reforma educacional que ponga fin a los procesos de privatización de la educación y la gratuidad en la salud y la educación, incluso universitaria.
Estos son algunos de los elementos que la candidatura de Frei podría poner en la discusión para lograr detener a la derecha y quitarle las posibilidades que puedan volver a gobernar, esto si los partidos de la Concertación y sus dirigentes, verdaderamente demuestran que han entendido el mensaje que el pueblo le ha dado.
El Partido Comunista de Chile, junto a la izquierda del Junto Podemos Más han demostrado lo que el pueblo reclamaba hace años, terminar con la exclusión. Es posible seguir avanzando, y en el futuro próximo hacer realidad los que nos heredó el Presidente Allende “Abrir las grandes Alamedas”.
Fuente: Tribuna Popular/PrensaPopularSolidaria_ComunistasMiranda http://prensapopular-comunistasmiranda.blogspot.com/ Correo: pcvmirandasrp@gmail.com
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