"Fortalecer la lucha contra la creciente agresividad imperialista, por los derechos democráticos y socioeconómicos de los pueblos, y por el Socialismo"
Traducción al Castellano de: PrensaPopularSolidaria/Ferrebé
Declaración Final de Beirut, del XIV Encuentro de Partidos Comunistas y Obreros (IMCWP)
El Decimocuarto Encuentro de los Partidos Comunistas y Obreros (IMCWP) se reunió en Beirut, Capital del Líbano, entre el 22 y el 25 de noviembre de 2012, bajo el lema de:
"Fortalecer la lucha contra la creciente agresividad imperialista, por los derechos democráticos y socioeconómicos de los pueblos, y por el Socialismo"
A la reunión asistieron 84 delegados, representantes de 60 Partidos, de 44 países de los cinco Continentes del mundo, y fueron enviadas comunicaciones, Cartas y Documentos de Solidaridad enviadas por decenas de Partidos que no pudieron asistir debido a circunstancias fuera de su control.
La reunión, que sigue a la reunión extraordinaria que tuvo lugar en la región árabe, en Siria 2009, donde se afirmó la Solidaridad con Palestina, ha constituído una nueva oportunidad para que los Partidos Comunistas y Obreros refuercen su solidaridad y apoyo permanente a las luchas de la clase obrera en el mundo, y para apoyar las revueltas de los Pueblos de los Países Ärabes contra las agresiones imperialistas del gran capital, a las luchas por el cambio democrático. Las conversaciones, que tuvieron lugar durante la reunión, contribuyeron al intercambio de puntos de vista con respecto a los desarrollos que se presentan en todo el mundo y para establecer acuerdo sobre el desarrollo de acciones comunes y convergentes con el objetivo de realizar una lucha revolucionaria por el socialismo.
Declaración Final de Beirut del XIV Encuentro de Partidos Comunistas y Obreros (IMCWP)
En la Declaración Final de Beirut del XIV Encuentro de Partidos Comunistas y Obreros (IMCWP) se han reafirmado las Declaraciones anteriores emitidas durante las reuniones realizadas en 2008 y 2011, con respecto a la crisis capitalista de sobreproducción y de sobreacumulación de capital, cuya raíz se encuentra en la agudización de la principal contradiccion entre el capital y el trabajo, que se profundiza e intensifica continuamente.. Las diferentes versiones burguesas para la gestión de la crisis no han logrado ponerla bajo control, todas ellas tienen los mismos efectos brutales contra de los derechos de la clase obrera y los pueblos. La reacción imperialista ante la crisis se está caracterizando por una multifacética y violenta ofensiva del imperialismo en contra de los derechos sociales, económicos, democráticos y nacionales de los pueblos, una ofensiva que tiene como objetivo destruir las conquistas logradas por la clase obrera y los pueblos del mundo en grandes luchas populares durante el siglo XX , y busca imponer de nuevo a los trabajadores el trabajo intensivo y acentuar e incrementar los niveles de explotación y opresión.
Este hecho, combinado con el aumento de la agresividad imperialista, con la expansión de sus guerras de agresión y de rapiña contra los pueblos para arrebatarles sus riquezas e imponerles gobiernos manejados por los poderes imperialistas, cuando también se presentan reajustes en la correlación internacional de fuerzas, donde el debilitamiento relativo de la posición de los EE.UU. se combina con el creciente poder económico y político de varios países y bloques emergentes, se plantea un conjunto de situaciones que indican que el mundo entra, una vez más, en una fase crítica y peligrosa, donde la competencia y las contradicciones se están intensificando, y donde estos grandes peligros coexisten con oportunidades reales para el desarrollo de las luchas de la clase obrera, los trabajadores y los pueblos.
En este sentido, es importante plantear la siguiente pregunta: ¿cómo el aumento universal de la agresividad imperialista se manifiesta militarmente, politicamente, economicamente e socialmente, y que formas asume?
En primer lugar, el imperialismo está llevando a cabo una ofensiva que apunta a la destrucción masiva de los derechos económicos, sociales, políticos, culturales y nacionales, conquiatados por la clase obrera y los pueblos en todo el mundo, y busca alcanzar una regresión en la correlación de fuerzas en el mundo que opere aún más en favor del capital y contra la clase obrera y los trabajadores. Operaciones masivas se están llevando a cabo para lograr una mayor concentración y centralización del capital. Al mismo tiempo, el imperialismo refuerza los ataques de largo alcance que se lanzan contra los derechos sociales y laborales, con recortes masivos en los salarios, el aumento masivo del desempleo, la privatización y la destrucción de los servicios sociales de los Estados (educación,salud,seguridad social), mediante la privatización de casi todos los sectores de la economía y las áreas de la vida social. Esta ofensiva anti-social va acompañada de una ofensiva sin precedentes contra los derechos democráticos, nacionales sociales, culturales y ecológicos de los pueblos.
En particular, el ataque contra los derechos laborales, económicos y sociales de las mujeres se ha agudizado, provocando un brutal empeoramiento de las condiciones de vida, tanto en los ámbitos de trabajo públicos como en los privados. El direccionamiento para combatir y derrotar esta agresión es crucial, porque la lucha por la igualdad real de las mujeres es una parte vital en la lucha contra el capitalismo.
En segundo lugar, hay que subrayar que la reafirmación de Barack Obama en la ONU, donde afirmó y recalcó que su país no va a "retirarse" del mundo, está de acuerdo con el programa aprobado por la OTAN en su última cumbre en Chicago. Efectivamente, esta declaración lo que implica es un anuncio sobre el aumento de la intervención militar imperialista estadounidense en todo el mundo bajo el lema de "defensa inteligente". Esto incluye el lanzamiento de la primera fase del "escudo espacial" o "Star Wars" en Europa y del programa global "antimisiles", las operaciones como la intervención militar directa en Libia, ahora en Siria, las amenazas permenentes contra Irán y la RDP de Corea, el aumento general de la actividad militar imperialista, las continuas agresiones y provocaciones en el Oriente Medio, en la zona de Asia Pacífico y en todo el continente africano, la intensificación del militarismo imperialista en América Latina y el Caribe. Continúa la intensificación de la hostilidad y el bloqueo contra Cuba, así como las conspiraciones contra Venezuela y otras naciones con gobiernos nacionalistas y progresistas de América Latina
En tercer lugar, esta campaña de agresiones militares va acompañada de intervenciones políticas públicas e insolentes en los asuntos de la mayoría de países del mundo. Estas intervenciones se manifiestan por el uso del capital y su influencia con el fin de distorsionar y falsificar la voluntad de los pueblos, con el fin de manipular, intimidar e impedir que los representantes elegidos por los pueblos puedan aplicar sus propias políticas.. Las fuerzas imperialistas no dudan en emplear las peores herramientas para lograr sus objetivos, incluyendo la organización de atentados terroristas, golpes militares, aliándose y/o promoviendo los poderes neo-fascistas, la promoción de políticas derechistas de distintos sectores - los poderes religiosos y las diversas fuerzas contrarrevolucionarias de diferentes orígenes ideológicos - todo en aras de ejercer el control imperialista en todo el planeta, con sus esfuerzos por redibujar las fronteras y reorganizar los mercados sectoriales, especialmente el mercado de energía con su petróleo y gas y las rutas de transporte.
En cuarto lugar, esta campaña de agresión militar está también acompañado por la intensificación de la agresividad en todos los campos posibles, tales como el empleo de todos los recursos de diversos organismos y organizaciones internacionales manejados por el imperialismo, y en particular el FMI, el Banco Mundial y la Unión Europea, que son usados para salvaguardar la defensa del poder del Gran Capital. Con el fin de garantizar sus intereses y objetivos, además de fomentar el desarrollo de la agresión y las intervenciones insolentes en los países del mundo, el régimen capitalista mundial se mantiene firme en hacer la guerra a la clase obrera internacional y sus representantes, a través de una variedad de medidas, como :
-----La negación del derecho humano fundamental al trabajo, y los beneficios asociados obtenidos por la clase obrera.
----Una ofensiva ideológica global a través de los medios de comunicación con el objetivo de contener a los trabajadores y las luchas populares y perseguir a todas las fuerzas sociales y políticas que luchan contra el imperialismo, especialmente los Partidos Comunistas y Obreros.
----Los esfuerzos concertados y acciones en violación de todos los Derechos que se incluyen en la Carta de la ONU y en la "Declaración Universal de los Derechos Humanos", Derechos que se han formulado en condiciones de una correlación diferente de fuerzas, gracias a la presencia de la Unión Soviética y otros Países Socialistas cuando fueron establecidos.
En quinto lugar, en el contexto de esta acción de gran envergadura de la agresión imperialista global, se debe prestar atención a la manera en que se está manifestando en el Oriente Medio, a través del proyecto del "Nuevo Oriente Medio", que tiene como objetivo la re-división de la región y reformulación de fronteras y buscan el enfrentamiento de su población, para fomentar guerras entre sus distintos grupos étnicos y religiosos, a fin de lograr que estén constantemente luchando entre sí. Esto a su vez permite la apropiación de los recursos naturales que se encuentran en esta región y en particular los recursos de petróleo y gas. Las guerras y ocupaciones militares de Afganistán, Iraq y Libia, y de las agresiones israelíes contra el Líbano y contra el pueblo de Palestina son una parte inseparable de la búsqueda por el imperialismo de la imposición del proyecto del llamado "Big Medio Oriente" .
Además, es en el contexto de este proyecto que los acontecimientos recientes deben ser analizados incluyendo:
1.- La escalada por parte de los EE.UU. y la Unión Europea de las amenazas imperialistas de intervención militar en Irán y directa contra Siria, aprovechando mientras tanto de hacer que la violencia se perpetúe, actuando contra la población civil y usando las fuerzas terroristas infiltradas desde el extranjero por los imperialistas para sembrar la violencia.
2.- Los continuos esfuerzos para controlar la orientación de las revueltas que se han producido en los últimos dos años en varios de los países árabes y, en particular, Egipto y Túnez, a través del uso del sectarismo, el racismo y los prejuicios, las infiltraciones de terroristas a su servicio, así como también usando siempre los complacientes petrodólares de todos los regímenes árabes de los gobernantes reales (reyes, jeques) de los países del Golfo.
Estos acontecimientos y sus consecuencias potenciales, las usa el imperialismo para ejercer presión y persecusiones sobre la clase obrera y los Partidos Comunistas y Obreros, para tratar de impedir que lleven a cabo sus responsabilidades históricas de enfrentar el sistema capitalista y la agresión imperialista. Esta confrontación, que debe llevarse a cabo en diferentes países por separado, y coordinadamente en el plano internacional, es necesaria y una obligación para los Partidos Comunistas para conquistar rupturas anti-monopolistas y anti-imperialistas, alcanzar logros para la Clase Obrera y los Pueblos y tener éxito en la construcción del Socialismo, como se especifica en la Decimotercera Reunión Internacional de los Partidos Comunistas y Obreros, celebrada en diciembre de 2011 en Atenas.
La confrontación con el imperialismo impone el fortalecimiento de la cooperación y la solidaridad de nuestros partidos y la definición de los objetivos y directrices comunes de lucha por un lado, y la acción convergente con las diversas fuerzas políticas antiimperialistas, nacionalistas, de la clase obrera, los sindicatos, los campesinos, los movimientos de masas,de las Mujeres , la Juventud, la Intelectualidad revolucionaria y progresistas, y las organizaciones populares.
En América Latina, las fuerzas anti-imperialistas, los sindicatos y otros movimientos sociales continúan su lucha por los derechos de la clase obrera y de los pueblos, y contra el imperialismo. Estas luchas, que son el objetivo de una contraofensiva antiimperialista de los pueblos, ha llevado, en algunos casos, a la aparición de gobiernos que se declaran en defensa de la soberanía nacional y de los derechos sociales, y cumplen procesos de lucha para el desarrollo y protección de sus recursos naturales y de la diversidad biológica, y debemos tener en cuenta que estos movimientos dan un nuevo impulso a la lucha contra el imperialismo.
Esta confrontación universal también determina y nos obliga a fortalecer la organización de los trabajadores en su lugar de trabajo y en los sindicatos, a trabajar por el fortalecimiento del movimiento de clase, de la clase obrera, orientado a la promoción de la alianza de la clase obrera con los estratos populares oprimidas, a la intensificación de la lucha de clases en cada País e internacional de los trabajadores del mundo, con contenido de clase y consecuencia proletaria y revolucionaria. Con el fin de impedir las medidas antipopulares y promover los objetivos de la lucha de clases, en la lucha para que se cumpla con las necesidades de la clase obrera y los pueblos, los Comunistas estamos obligados a conducir un contraataque para lograr las rupturas anti-monopolios y anti-imperialistas y por el derrocamiento del capitalismo.
La lucha ideológica del movimiento comunista es de vital importancia a fin de defender y desarrollar el socialismo científico, para repeler el anticomunismo contemporáneo, confrontar la ideología burguesa, y todas las tendencias, teorías exóticas anti-científicas y corrientes oportunistas que rechazan la lucha de clases. Estamos obligados a combatir el papel de las fuerzas socialdemócratas que defienden y ejecutan programas contra la clase obrera y los pueblos y respaldan las políticas pro-imperialistas mediante el apoyo a la estrategia del capital y el imperialismo. La comprensión del carácter unificado de los deberes de la lucha por la emancipación social, nacional y de clase, para la promoción distintiva de la alternativa socialista, requiere de la contraofensiva ideológica del movimiento Comunista.
Teniendo en cuenta la crisis capitalista y sus consecuencias, las experiencias internacionales de la construcción socialista que demuestran la superioridad del socialismo, subrayamos y reafirmamos nuestra solidaridad con los pueblos que luchan por el socialismo y con los que están involucrados en la construcción del socialismo.
En base a todo lo anterior, hacemos hincapié en la necesidad de centrarse en las acciones conjuntas siguientes:
1.- Ampliar nuestra acción Comunista, revolucionaria, para hacer frente a los nuevos planes del imperialismo, los cuales aplican para imponerse en los niveles militares, políticas, económicas y sociales. Fortalecer nuestras luchas con el fin de evitar que el imperialismo logre el control del mundo y hasta destruirlo.
2. Luchar por la eliminación de la OTAN y sus bases militares , y por el derecho de los Países que lo quieran de retirarse de las alianzas imperialistas.
3.-- Expresar la solidaridad de clases y dar todo tipo de apoyo para fortalecer a la clase obrera y las luchas populares en los países capitalistas en contra de las políticas que ponen más cargas sobre los trabajadores y los pueblos, y para ganar beneficios para mejorar las condiciones de vida de los trabajadores y los pueblos , y reforzar la solidaridad con los Países y los pueblos que efectúan cambios revolucionarios.
4.---Reafirmar la solidaridad internacional con los movimientos democráticos populares y los levantamientos en contra de la ocupación imperialista y los regímenes opresivos, y manifestar el rechazo categórico de la intervención imperialista en estos países. Reforzar las luchas y la Solidaridad con los Pueblos y Naciones que combaten contra los Procesos de Recolonización que conduce el Imperialismo, y apoyar firmemente los Procesos de Lucha por la Autodeterminación y la Liberación Nacional de las Colonias que aún existen.
5.-- Confrontar firmemente las leyes, medidas y persecuciones n anticomunistas. Librar una lucha ideológica firme y permanente contra la revisión de la historia, y para reafirmar la contribución del movimiento comunista y obrero en la historia humana.
6.-- Condenar el bloqueo de EE.UU. contra Cuba y aumentar el apoyo a la lucha de Cuba por su levantamiento inmediato. Fortalecimiento de las campañas para la liberación y el regreso de los cinco Patriotas cubanos a Cuba.
7.-- Condenar las atrocidades que se siguen cumpliendo por las fuerzas de ocupación israelíes contra el pueblo Palestino, apoyando al pueblo Palestino en su derecho a resistir la ocupación y la creación de su Estado Independiente, con Jerusalén Este como capital, y promover el fortalecimiento de la campaña por el levantamiento inmediato del bloqueo a Gaza y por el Derecho al Retorno de los Refugiados, y la libertad de los presos Palestinos en manos del Gobierno de Israel
8.--Promover el Frente Internacional Contra el Imperialismo y el apoyo a las organizaciones de masas antiimperialistas internacionales: la Federación Sindical Mundial (FSM), el Consejo Mundial de la Paz (WPC), la Federación Mundial de Juventudes Democráticas (FMJD), y la Federación Democrática Internacional de Mujeres (FDIM), en el marco específico de cada país.
Fuente: Solidnet/PrensaPopularSolidaria
http://prensapopular-comunistasmiranda.blogspot.com
Correo: pcvmirandasrp@gmail.com
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