URUGUAY: MILES CON LA 1.OO1 Y EL FRENTE AMPLIO-FA

El viernes pasado más de 10 mil jóvenes desbordaron la Explanada de la Universidad y casi dos cuadras de 18 de Julio en el acto de cierre de campaña de los Jóvenes 1001.

Fue un acto político, convocado como tal con miles de afiches, volantes y por las redes sociales; Marcos Carámbula, Juan Castillo y Gerardo Núñez, todos ellos candidatos de la 1001, expresaron sus propuestas y fueron escuchados con respeto y aplaudidos.

Pero fue más que eso. Fue una fiesta. Fue la expresión de una manera de relacionarse y de hacer política. Fue la integración de la cultura, la música, el baile, la alegría y la política. Eso que ha sido un patrimonio histórico de la izquierda. Igual pero diferente, nuevo, desafiante y removedor. Hasta en el sincero y nada formal compromiso expresado por las bandas que allí tocaron. Karma Man Kaya, su reggae y su explícito compromiso frenteamplista. La Triple Nelson, su calidad musical y su versión rockera de “Adagio a mi país” de Zitarrosa. Plagio, toda su fuerza ricotera y su rechazo a la represión como camino. Tabaré Rivero y su banda, su rock desenfadado, su reivindicación de los avances logrados hacia la libertad y de la militancia.

Miles de jóvenes, estudiantes, trabajadores, artesanos, de todos los barrios, compartiendo en alegría y fraternidad su compromiso. Ya había sido así en el Cerrito y en Piedras Blancas, allí con otros géneros musicales como la cumbia y la plena, pero con el mismo compromiso y la misma fraternidad.

Nadie que haya pasado por allí quedó igual. Ningún medio consideró noticia que más de 10 mil jóvenes participen de un acto político. Allá ellos. Lo dijimos y lo repetimos no hay que confundir la versión que dan los medios de la realidad con la realidad. La realidad es compleja, heterogénea, dialéctica. La realidad es mucho más que la pobre y sesgada versión que de ella dan los grandes medios. También en lo que a la campaña electoral respecta.

Los jóvenes y los trabajadores han sido dos protagonistas centrales de la campaña de la 1001, en todas las expresiones de esta, y eso es fundamental, para el 26 de octubre y para después, sobre todo para después.

En gran medida estos juicios anteriores sirven para analizar y definir lo que ocurrió, el mismo viernes en la Plaza Líber Serengi con el toque de la JSU, o unos días antes con los agites juveniles de la 609 o el domingo en el Prado con el agite final de “Poné Tercera”, de los jóvenes del Frente Amplio.

Otra vez miles, otra vez con alegría, otra vez diciendo No a la Baja y expresando su condición de frenteamplistas, de izquierda, sus ganas de ser protagonistas.

Fuente: El Popular/PrensaPopularSolidaria
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