RUSIA EXIGE CAMBIOS

Por: Guennady Ziuganov
De: Gazeta Pravda

Traducido del ruso por Josafat S. Comín/CCCP_ Blog de J. Comín

Llevamos dos meses viendo cómo se desarrollan por toda Rusia distintos actos exigiendo unas elecciones limpias. El 4 de febrero se convocaron toda una serie de mítines de ese tipo, que vienen a demostrar el rechazo frontal ante la manipulación de la voluntad popular. Incluso los organizadores de los mítines progubernamentales se ven obligados a organizarlos bajo el lema: ¡Por unas elecciones limpias! En este escenario ha quedado meridianamente clara la aspiración de las fuerzas ultraliberales, de subirse al carro de la indignación popular a fin de devolver al poder a aquellos que tomaron parte en la destrucción de la URSS y sentaron las bases del actual sistema fraudulento: Entre ellos, los señores Nemtsov, Kasiánov Kudrin y demás pilares del régimen gobernante.

Desde mediados de los 90, el PCFR lleva luchando ─no de palabra, sino con hechos─, por unas elecciones limpias y libres. Nosotros ya luchábamos por ellas, cuando muchos de los “cabecillas” de la plaza Bolótnaya y de la colina Poklónnaya, con espuma en la boca, ensalzaban al grupo de Yeltsin-Putin, cerrando los ojos ante el masivo robo de votos de los electores. Son nuestros observadores, a quienes echan a empujones de los colegios electorales. Somos nosotros los que hemos llevado a cabo cientos de actos de protesta por todo el país y hemos acudido a los tribunales, incluido el europeo de DD.HH., solicitando la anulación de los resultados fraudulentos. Es precisamente por la defensa consecuente de los intereses del pueblo, por lo que nos respaldan activamente hoy los ciudadanos de Rusia.

Estamos convencidos de que la falsificación de los resultados de la voluntad popular, al nivel que sea, desde una Junta de distrito hasta la CEC, representa un acto de usurpación del poder. Un hecho que debe ser considerado como delito grave, que no prescriba y que suponga pena de cárcel de entre 10 y 15 años, con confiscación de bienes.

Nuestros actos organizados “Por unas elecciones limpias y una vida digna”, los convocamos antes de los informes de Chúrov y de los responsables de las Fuerzas de Seguridad en la Duma. Cuando organizamos el mitin en la plaza Manezhnaya de Moscú, cedimos lo micrófonos a los activistas de todos los movimientos sociales que exigen que se den unas elecciones bajo los principios de honestidad, transparencia e igualdad de todos los participantes. El PCFR propuso un mecanismo concreto para la realización de esas exigencias. Nuestro grupo parlamentario ha presentado en la Duma un paquete de nueve proyectos de ley, que permitirían acabar con el fraude en los resultados de las elecciones. La aprobación de estas leyes no supondría ningún gasto complementario y garantizaría la limpieza en el escrutinio de los votos.

En primer lugar, es imprescindible modificar el sistema de formación de las Comisiones electorales a todos los niveles. Para garantizar la defensa ante falsificaciones, deben estar compuestas de representantes de los distintos partidos, sobre una base paritaria.

En segundo lugar, es imprescindible que haya una garantía sólida de la defensa de observadores y periodistas frente a la arbitrariedad de los funcionarios. Éstos (los compromisarios) deben tener todas las posibilidades para el normal desarrollo de sus competencias.

En tercer lugar, deben garantizarse un escrutinio y anuncio de los resultados, públicos. Cada papeleta debe mostrarse a todos los miembros de la Junta, a los observadores y a los periodistas. Los resultados de la votación deben darse a conocer lo antes posible y las actas con los resultados deben ir firmadas, de modo abierto, por todos los miembros de la Junta electoral, los observadores y los representantes de los medios de comunicación. Es hora de terminar con los amaños fraudulentos de los resultados de las elecciones en los despachos de los responsables, que es donde se dan las más descaradas manipulaciones, frente a las que las cámaras web de Putin nada pueden hacer.

Consideramos imprescindible aprobar en las próximas sesiones de la Duma los correspondientes proyectos de ley en tres lecturas. Solo entonces nuestro país podrá tener unas elecciones limpias y sacudirse tanto la arbitrariedad del gobierno, como la amenaza “naranja”.

Los nuevos intentos de “corregir” la voluntad popular, son el camino directo a nuevas convulsiones como las que está viviendo Oriente Próximo. La celebración en un mismo día de actos como el de la plaza Bolótnaya y el de la colina Poklónnaya, son ya un síntoma de una aguda polarización social. Para las fuerzas políticas responsables ha llegado el momento de forzar a unos y otros a tener en cuenta el interés de las masas, en vez de satisfacer sus propias ambiciones.

Nuestro pueblo se basta para solucionar sus problemas sin la intromisión de “benefactores” del exterior. Occidente lleva prácticamente dos décadas ignorando con altanería las maquinaciones electorales en Rusia. Solo ahora, cuando las fuerzas prooccidentales se han visto arrojadas a la cuneta política, los arquitectos de la política exterior de los EE.UU. y de Europa, tan “amantes de la libertad”, se han preocupado por la situación en nuestro país.

El PCFR apuesta por el diálogo constructivo y razonable. Exigimos del gobierno que cese de provocar la confrontación en la sociedad y de crear las condiciones para la injerencia externa. Para ello, “Rusia Unida” está obligada a aprobar sin demora nuestras propuestas de reforma del sistema electoral. El país ya ha recibido un parlamento de dudosa legitimidad, tanto en el plano moral, como en el político. Sin unas elecciones limpias, la legitimidad del futuro jefe de estado, también será puesta en duda.

Necesitamos además medidas urgentes que saquen al país de la crisis socio-económica. Para eso necesitamos que el falso dilema: ¿Está usted a favor del Kudrin que apoya a Putin, o del Kudrin que apoya a Prójorov y Nemtsov? no sustituya a la lucha electoral.

Las elecciones presidenciales deben ser terreno para la confrontación de contenidos, de los programas de los distintos partidos. Los debates en igualdad de condiciones, están llamados a ayudar a la gente de decidir su elección.

Hacemos un llamamiento a todos los compatriotas con una postura cívica activa, a que respalden nuestras propuestas y actuar de modo solidario. Solo juntos conseguiremos unas elecciones limpias. Solo entonces sus resultados garantizarán la expresión de la voluntad popular de la mayoría y permitirán al país salir de la crisis.

Fuente: Gazeta Pravda/CCCP_Blog de Josafat Comín/PrensaPopularSolidaria (PrenPopSol_PPS)
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