Por: Juan Lopez
Traducción de Ramón Valdés
Es necesario porque el movimiento obrero -si bien es la fuerza progresista más grande, más fuerte y mejor organizada del país- es actualmente demasiado pequeño para los desafíos que enfrenta la clase obrera y el pueblo de nuestra nación.
Es posible porque -a diferencia del anticomunismo tenaz de antaño que estaba condicionado por la Guerra Fría y el macartismo- la experiencia de los últimos años ha mostrado que las puertas están abiertas para los luchadores honestos con energía positiva e ideas progresistas, incluso miembros de nuestro grupo.