“Trataron de tumbar la puerta de la casa, y nos gritaban que apagáramos
la música y saliéramos”. Así recuerda el Camarada Benancio Villalba Guerra, Dirigente Comunista en el Municipio Baruta, que fue como comenzó la agresión que sufrió el pasado 14 de febrero, por agentes de
la Policía Municipal de Baruta.
El Camarada Benancio Villalba es dirigente del Partido Comunista de Venezuela (PCV) en Baruta y en la Organización Intermunicipal Miranda Centro del Partido Comunista de Venezuela, y fue
candidato a Concejal por el Gran Polo Patriótico en las elecciones de
diciembre 2013. Reside desde hace muchos años en el barrio Santa Cruz
del Este, del Municipio Baruta, del Estado Miranda.
“Estábamos celebrando el Día de los Enamorados con mi esposa y un
grupo de familiares y amigos, cuando comenzó un cacerolazo en un
edificio cercano que está lleno de escuálidos, y nosotros respondimos
poniendo canciones de Alí Primera. Al poco rato, como a las 7:45 pm,
llegaron los policías”, explica Villalba, puntualizando que invocó el
derecho constitucional a la inviolabilidad del hogar y se resistió al
allanamiento de su casa, pero los PoliBaruta, cual acción comando,
irrumpieron en una casa vecina, treparon un muro y penetraron por la
terraza.
Los policías arrestaron ilegalmente y con violencia excesiva a
Villalba y a otros tres ciudadanos, y se los llevaron esposados y
encapuchados en un vehículo de PoliBaruta. Durante el traslado, los
cuatro detenidos fueron sometidos a maltratos, insultos y vejámenes
diversos; Villalba fue amenazado de muerte con una pistola en la cabeza,
y fue brutalmente golpeado y pateado en varias partes del cuerpo, a
resultas de lo cual sufrió fractura del húmero del brazo derecho y
hematomas diversos.
Tras pasar la noche en un calabozo con severos dolores y sin atención
médica, Villalba y los otros detenidos fueron trasladados y presentados
el 15 de febrero ante un Tribunal de Control, el cual ordenó la
libertad bajo régimen de presentación de los cuatro y una pesquisa
forense urgente de las lesiones de Villalba. La medicatura forense del
CICPC certificó y documentó al día siguiente las severas lesiones
sufridas por el militante comunista.
El 20 de febrero, con el brazo enyesado y ya en recuperación de sus
otras heridas, Villalba, quien hasta ahora nunca había tenido
antecedentes policiales por ninguna causa, se dirigió a la Defensoría
del Pueblo a denunciar lo sucedido; esta oficina conoció el caso y lo
remitió a la Fiscalía Pública 125, donde también lo recibieron y tomaron
nota de los pormenores del caso. Ese mismo día, Villalba hizo asimismo
la denuncia ante la Policía de Baruta, e identificó por fotografías a
los agentes responsables.
Villalba está a la espera de que la Defensoría del Pueblo y la
Fiscalía Pública tomen acciones para la defensa y protección de sus
derechos constitucionales y humanos. Y advierte que “hasta ahora no
sabemos si PoliBaruta tomó medidas disciplinarias contra los agentes
culpables. No sabemos si estos malandros con uniforme siguen todavía por
ahí, y hago responsables a PoliBaruta y a las autoridades municipales
de Baruta por lo que nos pueda pasar a mí o a mi familia”.
“Seguro que esta agresión que sufrimos fue una represalia por mi
posición política, que es públicamente conocida desde hace años. En mi
casa hemos tenido reuniones del Partido y con los vecinos, y hay alguna
gente que se ha metido con nosotros antes, pero nunca había pasado algo
así, y menos con la policía”, concluye Villalba.
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