HACIAL EL XVIII CONGRESO (DEL PARTIDO COMUNISTA DE ESPAÑA)

Hacia el XVIII Congreso”
Raúl Ariza
SECRETARIO GENERAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE ARAGÓN

El XVII congreso del PCE, celebrado en el 2005, supuso un cambio importante en la relación del Partido con la sociedad. Fue en ese congreso donde el PCE decidió salir de una segunda clandestinidad voluntariamente aceptada, y hoy, aunque 4 años en los procesos históricos son poco tiempo para sacar conclusiones, no es menos cierto que el desarrollo organizativo y político del PCE ha sido importante.

Partíamos de un modelo de partido que subrogaba todo su trabajo, su militancia y sus energías, a ser útil al proyecto unitario que pretendió ser la IU original. Esas dinámicas, una vez recuperadas la interlocución directa con la sociedad, salvo la presentación directa a las elecciones, nos han llevado a un escenario esperanzador.

No existe una foto fija del desarrollo de las estructuras organizativas del PCE en todo el Estado, diferentes circunstancias han influido en el devenir seguido por cada una de las federaciones del Partido, pero es incuestionable que el Partido que queremos tener para ser una herramienta útil para la transformación de la sociedad, es más fuerte hoy que hace 4 años.

Hemos tenido aciertos y errores, y será en el XVIII congreso en el que se haga balance del trabajo proyectado, y el realmente desarrollado. Para corregir los errores cometidos y profundizar en las decisiones acertadas, es VITAL el análisis crítico y sereno del trabajo desarrollado.

Solamente desde la sinceridad absoluta, enmarcada en los debates precongresuales, cuya última etapa será el mismo congreso, seremos capaces de mejorar nuestra influencia en la sociedad, y optimizar nuestros recursos humanos y económicos.

No existe en este proceso ningún tema “innombrable”. Desde la lealtad que las y los comunistas tenemos con nuestra conciencia revolucionaria, es necesario poner encima de la mesa todas nuestras propuestas, anhelos y objetivos políticos.

En este debate, dinamizado desde los documentos aprobados en el Comité Federal del día 4 de Julio, se encuentran plasmadas las líneas políticas, organizativas y los Estatutos que deben garantizar un salto cualitativo y cuantitativo en nuestra apuesta inequívoca hacia el Socialismo del siglo XXI.

El debate congresual va a desarrollarse con un método novedoso para nuestra práctica habitual. Las modificaciones para presentar las enmiendas, los plazos que desde la ponencia nos hemos marcado y la imperiosa necesidad de mejorar la transparencia en los debates, nos hacen ser optimistas sobre los resultados finales.

El XVIII congreso, será el de la dirección colectiva y colegiada, y el de la cohesión interna. Aquellos que aprovecharon la debilidad organizativa del PCE para autopromocionarse en los diferentes ámbitos donde los comunistas trabajamos, tienen los días contados.

La necesidad de la coherencia entre lo que se dice y lo que se hace, es una tarea que se va a ver reflejada en nuestros estatutos.

Los tiempos de presumir de militancia y atacar a la vez a la organización de la que se alardea pertenecer, habrán terminado.

La dirección saliente del XVIII congreso aplicará con tranquilidad, serenidad y rigor, los estatutos que aprobemos. Llega el momento de decir quien merece el orgullo de tener el carnet del PCE, y quien ha confundido un “laboratorio de ideas” o un “camión de mano de obra gratuita” con el Partido que queremos construir, debe saber cual va a ser su destino.

Camaradas, lo dijo Martí:
“Sólo sirve dignamente a la libertad el que, a riesgo de ser tomado por su enemigo, la preserva sin temblar de los que la comprometen con sus errores”.

Fuente: LaRepública.es/ Edición de: PrensaPopularSolidaria_ComunistasMiranda

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