Este articulo habla de la Muerte de Filiberto Ojeda y esboza algunos aspectos de los efectos que debe tener sobre la lucha independentista tan vil asesinato |
Por: El Seguidor del Viejo
Eran alrededor de las 5:00 de la tarde del viernes 23 de septiembre cuando llegaba al Boricua como muchas tardes de viernes. Allí, con muy poca gente aun, algunos compañeros conversábamos sobre el Lares este. Una celebración marcada por la desunión, las acusaciones y por el poder que algunos creen tener para dictar quien es independentista y quien puede o no estar en el Lares y su tarima para las actividades del Grito de Lares. Este era un gran momento para no ir a ese lares, como consigna pudo haberse dicho: A Lares sin necedades, porque estoy convencido que lo que se dio en esa tarima gloriosa el viernes nada adelanta la unidad de las fuerzas independentistas y revolucionarias.
Decidí, a los 15 minutos de mi llegada al lugar, ir a mi casa. Ya en mi casa una gran amiga me llama al teléfono para preguntarme si yo sabía sobre la emboscada que le estaban tendiendo en ese momento al Camarada Ojeda Ríos. Mi primera reacción fue de duda sobre la información de la compañera. Pero luego de esta llamada se sucedieron más de una veintena de llamadas hablando de lo mismo.
La información se congelaba, la congelaban y escondían los medios de difusión masiva poco o nada decían. En esa situación el momento era angustioso. Más tarde se confirmaban los hechos. Los esbirros del imperialismo asesinaban a un revolucionario que se defendía con los medios a su alcance por mantener a raya a los niños del capital en una batalla desigual. Algunas horas mas tarde nos confundíamos en dolor, indignación, entrega e impotencia frente al estadio Hiram Bithorn y de aquí al fuerte de los federales en la Chardón.
Pero, luego de la desaparición biológica del camarada, los comunistas, socialistas, nacionalistas e independentistas en general debemos hacer un gran ejercicio de reflexión, teniendo como objetivo estratégico construir la unidad de todas estas fuerzas en un eje de convergencia capaz de desarrollar el trabajo necesario para alcanzar la independencia total y entrar en un proceso de construcción de la sociedad socialista.
Esto tiene que darse a través del más profundo conocimiento de la realidad objetiva y con la evolución permanente del factor subjetivo, es decir la conciencia popular por la Independencia con avance socialista. No es posible lograr la Independencia, y más aun, construir la nueva sociedad sin la unidad en la acción de todas las fuerzas que esten de acuerdo con los objetivos estratégicos de la independencia y el socialismo.
Claro hay que ver la lucha por la independencia y el socialismo como parte de una misma lucha. Nuestra contradicción principal es la contradicción Imperio/Nación, pero también tenemos la contradicción fundamental del capitalismo: Trabajo/Capital.
Como parte de lo que hay que hacer, en un proceso permanente y amplio de estudio, es retomar las aportaciones de muchos teóricos marxistas de distintos países y épocas. Por ejemplo el caso de Gramci hay que mencionarlo porque parece ser que se ha olvidado en el estante de los libros y no se utilizan sus aportaciones teóricas sobre todo en lo que concierne a la lucha de clases en sociedades como las nuestras y la lucha de clases en espacios como los parlamentos. Además del papel de los intelectuales en este proceso desde la óptica de Gramsci.
Es necesario también que surja un verdadero polo comunista que de dirección y aporte a nivel militante y organizativo en este proceso.
Camaradas, lamentamos profundamente la forma en que el imperialismo gringo nos mató al compañero Filiberto Ojeda Ríos, pero lo importante sigue siendo su vida, su ejemplo. Deberíamos ser como Filiberto. Fidel Castro en los momentos de la muerte de Ernesto Che Guevara diría unas palabras que aplican también a Filiberto y a todos esos artistas del fusil: “Podrá morir el artista, sobre todo cuando se trata de un arte tan peligroso como la lucha revolucionaria, lo que no morirá es el arte al cual consagró su vid”.
Compañeras y compañeros tenemos que redoblar fuerzas, limar asperezas y renovar el compromiso revolucionario y crear las condiciones para lograr la independencia y el socialismo. En este proceso Filiberto estará, como siempre con nosotros, con su pueblo, porque el Comandante Filiberto Ojeda Ríos es de los muertos que nunca muere.
Patria o Muerte!
Fuente:El Seguidor del Viejo/Indymedia/Envío de Codaine a nuestro Correo/PrensaPopularSolidaria
http://prensapopular-comunistasmiranda.blogspot.com