Por: Hassem Nasrallah/ Compilación Rodrigo Valdes
El 6 de enero de 2008, en ocasión de la velada del Achura, Sayyed Hasan Nasrallah, secretario general del Hezbollah, criticó la estupidez política de la guerra israelí.
En pocos días, esa agresión ha unido a árabes y musulmanes, echando abajo años de esfuerzos estadounidenses tendientes a sembrar la división entre ellos y hacerles creer en un imaginario peligro iraní.
La dirección de la Resistencia palestina no depende de nadie, al igual que la Resistencia libanesa. Fuimos nosotros mismos quienes decidimos proceder a la captura de soldados en julio de 2006, porque era la única posibilidad de recuperar a nuestros [compañeros] detenidos. Ni Irán ni Siria estaban al tanto.
Nosotros asumimos la responsabilidad por nuestros propios actos. El enemigo israelí respondió con una operación preparada de antemano. Ahora, al igual que sucedió con nosotros, se le imputa la responsabilidad de la guerra al Hamas y a los grupos de la Resistencia con el pretexto de que rechazaron la prolongación de la tregua. Hay que saber que lo que está pasando en Gaza no es la respuesta al lanzamiento de unos cuantos cohetes.
La dirección de la Resistencia palestina decidió rechazar la prolongación de la tregua porque no había más que dos opciones: la prolongación de la tregua con el mantenimiento del bloqueo o el rechazo de la prolongación de la tregua para imponer nuevas condiciones sin bloqueo. Ahora hay quien acusa ahora a la Resistencia palestina de haber recibido de Siria o de Irán la orden de rechazar la prolongación de la tregua. (…)
Eso es completamente falso. Sepan que nuestros aliados nunca nos han impuesto nada. Nadie nos ha puesto condiciones. Sepan que la dirección de la Resistencia en la franja de Gaza toma sus propias decisiones por sí misma. Sólo ella acepta o rechaza las condiciones. (…)
Algunos defienden la tesis de los intereses regionales de Siria e Irán. Eso es absolutamente falso. Es injusto. (…) Yo me dirijo a ciertos libaneses, les digo que cuando el secretario general iraní del Consejo de Intereses Superiores Iraníes Said Jalili vino a reunirse con algunos responsables, en Siria y en Líbano, entre ellos conmigo, y cuando los responsables iraníes vienen, no lo hacen para darnos órdenes, sino para ofrecernos ayuda. (…)
Esta Resistencia, en Líbano, en Palestina, no depende de nadie y no es una fuerza mercenaria, porque ella misma es quien paga con su propia sangre, con la sus familias, ella es quien hace frente a los sufrimientos y las presiones; (…)
Ahora que hay propuestas de soluciones para ser discutidas, los que tienen el derecho de aceptarlas o de rechazarlas son solamente los miembros de la Resistencia, los que luchan y enfrentan todo tipo de presiones. (…) A la luz de nuestra experiencia durante la guerra de julio, dejen que la dirección palestina tome la decisión que le parezca conveniente, sabiendo que su objetivo es romper el bloqueo.
Lo que estoy diciendo es que hay regímenes que no entienden la presencia de movimientos autónomos. Uno de los objetivos reales de esa operación es apoderarse del poder de decisión de la Resistencia. (…)
La iniciativa europea no tiene ningún valor porque pone en un mismo plano al verdugo y a la víctima, apoya incondicionalmente a Israel y no logra imponerle solución alguna. (…) No puede proteger a nadie. Ni siquiera la respeta el verdugo al que apoya (…)
Sepan ustedes que Israel no puede aceptar ninguna iniciativa sin el consentimiento de Estados Unidos, porque Israel no es más que un instrumento en manos de los estadounidenses. (…) Ni siquiera el Consejo de Seguridad [de la ONU] tiene la capacidad de decretar nada a favor del pueblo palestino (…) El poder de decisión está en manos del presidente estadounidense Georges Bush. (…)
Pero lo que sí será verdaderamente decisivo es lo que está sucediendo en el terreno. Al igual que durante la guerra de julio (en el Líbano), es evidente que hay muchas víctimas (…) Pero, a diferencia de la guerra de julio, Israel esconde a la opinión pública israelí los hechos que están teniendo lugar en el terreno. (…)
Ayer los combatientes lucharon con un coraje y una bravura excepcionales. Hubo bajas en las filas del enemigo. Resultó muerto el comandante de una brigada israelí. Los israelíes no hablan de eso, no hacen más que difundir alguna información poco a poco. Pero no les quedará otro remedio que mencionarlo.
Al cabo de 4 días de operaciones terrestres, se ven obligados a hablar de dificultades en el campo de batalla, de túneles, de combatientes dispuestos a realizar operaciones suicidas. Eso es mucho más importante que lo que sucedió durante la guerra de julio. Están reconociendo que la tenacidad de los combatientes palestinos no ha disminuido (…)
Esa realidad del campo de batalla es lo que acabará imponiendo la ecuación política. (…) Lo natural es que se invite al Hamas a las negociaciones para buscar una solución, y hay que desplegar esfuerzos para poner fin a esta guerra y al bloqueo. Sepan ustedes que Israel y todos los que le han dado su apoyo son estúpidos e idiotas porque los resultados están siendo contrarios a lo que ellos quieren (…)
Durante estos últimos meses se estaban produciendo esfuerzos estadounidenses, israelíes y árabes por presentar a Irán como el enemigo número uno de la nación árabe y no de Israel. Ahora todos esos esfuerzos han fracasado debido a esta guerra que ha demostrado nuevamente que Israel es el verdadero enemigo de la nación árabe.
Ciertos árabes han querido desviar el conflicto hacia un enfrentamiento confesional, de sunnitas contra chiítas. Ellos también han fracasado. Esta guerra estúpida ha unido a los árabes y los musulmanes. (…)
Durante estos últimos años se habían producido esfuerzos a favor de la instauración de una situación de normalidad y muchos países se han unido a esos esfuerzos. Pero hay que decir esos esfuerzos también se han visto afectados. (…) Gracias a Dios, nuestros enemigos son idiotas que solamente saben matar civiles e inocentes. Ellos mismos están haciendo fracasar sus propios planes. (…).
Hassan Nasrallah
Hassan Nasrallah es secretario general de Hezbollah
El 6 de enero de 2008, en ocasión de la velada del Achura, Sayyed Hasan Nasrallah, secretario general del Hezbollah, criticó la estupidez política de la guerra israelí.
En pocos días, esa agresión ha unido a árabes y musulmanes, echando abajo años de esfuerzos estadounidenses tendientes a sembrar la división entre ellos y hacerles creer en un imaginario peligro iraní.
La dirección de la Resistencia palestina no depende de nadie, al igual que la Resistencia libanesa. Fuimos nosotros mismos quienes decidimos proceder a la captura de soldados en julio de 2006, porque era la única posibilidad de recuperar a nuestros [compañeros] detenidos. Ni Irán ni Siria estaban al tanto.
Nosotros asumimos la responsabilidad por nuestros propios actos. El enemigo israelí respondió con una operación preparada de antemano. Ahora, al igual que sucedió con nosotros, se le imputa la responsabilidad de la guerra al Hamas y a los grupos de la Resistencia con el pretexto de que rechazaron la prolongación de la tregua. Hay que saber que lo que está pasando en Gaza no es la respuesta al lanzamiento de unos cuantos cohetes.
La dirección de la Resistencia palestina decidió rechazar la prolongación de la tregua porque no había más que dos opciones: la prolongación de la tregua con el mantenimiento del bloqueo o el rechazo de la prolongación de la tregua para imponer nuevas condiciones sin bloqueo. Ahora hay quien acusa ahora a la Resistencia palestina de haber recibido de Siria o de Irán la orden de rechazar la prolongación de la tregua. (…)
Eso es completamente falso. Sepan que nuestros aliados nunca nos han impuesto nada. Nadie nos ha puesto condiciones. Sepan que la dirección de la Resistencia en la franja de Gaza toma sus propias decisiones por sí misma. Sólo ella acepta o rechaza las condiciones. (…)
Algunos defienden la tesis de los intereses regionales de Siria e Irán. Eso es absolutamente falso. Es injusto. (…) Yo me dirijo a ciertos libaneses, les digo que cuando el secretario general iraní del Consejo de Intereses Superiores Iraníes Said Jalili vino a reunirse con algunos responsables, en Siria y en Líbano, entre ellos conmigo, y cuando los responsables iraníes vienen, no lo hacen para darnos órdenes, sino para ofrecernos ayuda. (…)
Esta Resistencia, en Líbano, en Palestina, no depende de nadie y no es una fuerza mercenaria, porque ella misma es quien paga con su propia sangre, con la sus familias, ella es quien hace frente a los sufrimientos y las presiones; (…)
Ahora que hay propuestas de soluciones para ser discutidas, los que tienen el derecho de aceptarlas o de rechazarlas son solamente los miembros de la Resistencia, los que luchan y enfrentan todo tipo de presiones. (…) A la luz de nuestra experiencia durante la guerra de julio, dejen que la dirección palestina tome la decisión que le parezca conveniente, sabiendo que su objetivo es romper el bloqueo.
Lo que estoy diciendo es que hay regímenes que no entienden la presencia de movimientos autónomos. Uno de los objetivos reales de esa operación es apoderarse del poder de decisión de la Resistencia. (…)
La iniciativa europea no tiene ningún valor porque pone en un mismo plano al verdugo y a la víctima, apoya incondicionalmente a Israel y no logra imponerle solución alguna. (…) No puede proteger a nadie. Ni siquiera la respeta el verdugo al que apoya (…)
Sepan ustedes que Israel no puede aceptar ninguna iniciativa sin el consentimiento de Estados Unidos, porque Israel no es más que un instrumento en manos de los estadounidenses. (…) Ni siquiera el Consejo de Seguridad [de la ONU] tiene la capacidad de decretar nada a favor del pueblo palestino (…) El poder de decisión está en manos del presidente estadounidense Georges Bush. (…)
Pero lo que sí será verdaderamente decisivo es lo que está sucediendo en el terreno. Al igual que durante la guerra de julio (en el Líbano), es evidente que hay muchas víctimas (…) Pero, a diferencia de la guerra de julio, Israel esconde a la opinión pública israelí los hechos que están teniendo lugar en el terreno. (…)
Ayer los combatientes lucharon con un coraje y una bravura excepcionales. Hubo bajas en las filas del enemigo. Resultó muerto el comandante de una brigada israelí. Los israelíes no hablan de eso, no hacen más que difundir alguna información poco a poco. Pero no les quedará otro remedio que mencionarlo.
Al cabo de 4 días de operaciones terrestres, se ven obligados a hablar de dificultades en el campo de batalla, de túneles, de combatientes dispuestos a realizar operaciones suicidas. Eso es mucho más importante que lo que sucedió durante la guerra de julio. Están reconociendo que la tenacidad de los combatientes palestinos no ha disminuido (…)
Esa realidad del campo de batalla es lo que acabará imponiendo la ecuación política. (…) Lo natural es que se invite al Hamas a las negociaciones para buscar una solución, y hay que desplegar esfuerzos para poner fin a esta guerra y al bloqueo. Sepan ustedes que Israel y todos los que le han dado su apoyo son estúpidos e idiotas porque los resultados están siendo contrarios a lo que ellos quieren (…)
Durante estos últimos meses se estaban produciendo esfuerzos estadounidenses, israelíes y árabes por presentar a Irán como el enemigo número uno de la nación árabe y no de Israel. Ahora todos esos esfuerzos han fracasado debido a esta guerra que ha demostrado nuevamente que Israel es el verdadero enemigo de la nación árabe.
Ciertos árabes han querido desviar el conflicto hacia un enfrentamiento confesional, de sunnitas contra chiítas. Ellos también han fracasado. Esta guerra estúpida ha unido a los árabes y los musulmanes. (…)
Durante estos últimos años se habían producido esfuerzos a favor de la instauración de una situación de normalidad y muchos países se han unido a esos esfuerzos. Pero hay que decir esos esfuerzos también se han visto afectados. (…) Gracias a Dios, nuestros enemigos son idiotas que solamente saben matar civiles e inocentes. Ellos mismos están haciendo fracasar sus propios planes. (…).
Hassan Nasrallah
Hassan Nasrallah es secretario general de Hezbollah