El 23 de Septiembre de 1868, unos 400 hombres mal armados tomaron la población de la ciudad de Lares y declararon el surgimiento de la República de Puerto Rico, una colonia que por ese entonces formaba parte del Imperio Español. Los rebeldes conformaron un gobierno provisional y hasta adoptaron como emblema una bandera que se denominó “Brazo de Oro”.
Al día siguiente decidieron atacar el poblado de Pepino, para poder así conseguir algunas armas. Pero el ejército estaba aguardando el ataque y con la ayuda de un refuerzo de hombres que llego justo a tiempo, repelió el ataque de los sublevados.
Estos se reagruparon en las afueras del pueblo, pero cuando se aprestaban a continuar con la lucha, llegó al lugar la tropa del General español Mosca. Ante la desigualdad de fuerzas, los independentistas puertorriqueños decidieron ordenar la retirada. El Ejército colonial los persiguió y consiguió arrestar a cientos de personas. Luego de un “juicio sumario”, siete de los cabecillas del movimiento rebelde fueron sentenciados a muerte, quedando así truncado el sueño de que Puerto Rico se libere del yugo del imperio Español.
Con el pasar de los años este hecho se empezó a conocer como el “Grito de Lares”, una fecha que todos los puertorriqueños recuerdan con actos y conmoraciones todos los 23 de septiembre de cada año.
Luego de estar bajo el dominio español, Puerto Rico en 1898 pasó a ser una colonia más de Estados Unidos. Oficialmente dejó de tener un status colonial en 1953, cuando -a instancias de Naciones Unidas (ONU)- se le fue otorgada la calificación de Estado Libre Asociado. Esto permitió que la nación centroamericana pueda tener un gobierno autónomo, pero el mismo debía seguir respetando la dependencia hacia Estados Unidos.
Mientras el año pasado se estaba celebrando el acto recordatorio del “Grito de Lares”, fuerzas del FBI asesinaron de un balazo en la localidad de Hormigueros al líder independentista Filiberto Ojeda Ríos. De 72 años de edad, este dirigente en 1976 fundó el Ejército Popular Los Macheteros: una organización armada que luchaba por la descolonización de Puerto Rico.
De acuerdo a Antonio Negron, uno de los líderes de Macheteros, el grupo surgió porque ”sabíamos que si dejábamos que las fuerzas anexionistas, que estaban ya cogiendo fuerza en Puerto Rico, tomaban el control, a la larga iban a llevar al coloniaje a su máximo desarrollo, y el puertorriqueño iba a perder su identidad, su idioma, su cultura, etc. Nosotros teníamos una responsabilidad con el pueblo, de mantener una historia de lucha, de resistencia, que para ese tiempo realmente no existía”.
Entre las acciones más relevantes que realizó el grupo armado se destacan la explosión de nueve aviones de los Estados Unidos en 1979 y el robo de siete millones de dólares a la compañía de seguridad norteamericana Wells Fargo, ocurrido el 12 de Septiembre de 1983.
Como consecuencia de este último hecho, Ojeda Ríos fue encarcelado, pero logró fugarse tres años tarde. Durante dieciséis años logró mantenerse en la clandestinidad, hasta que el
FBI acabó con su vida en medio de un “operativo” para lograr su arresto. De acuerdo al resultado de autopsia, el fundador de los Macheteros podría haber sobrevivido si hubiera recibido atención médica de inmediato, pero el FBI alegó que sus agentes esperaron para entrar al lugar porque no sabían si había explosivos en él.
El movimiento de independencia de Puerto Rico protestó airadamente por el asesinato de Ojeda Ríos y sostuvo que la acción del FBI, en un día tan significativo para los que pelean por la descolonización de la nación centroamericana, puede ser considerado como una provocación.
El sábado 23 de Septiembre de 2006, miles de personas se dieron cita en la Plaza de la Revolución en Lares no sólo para conmemorar la gesta libertadora de 1868, sino que también para homenajear a Filiberto Ojeda Ríos y al dirigente independentista Jorge Farinacci -quien murió hace un mes a causa de cáncer.
Unos días antes que se realizara el acto, el director local del FBI, Luis Fraticelli, advirtió sobre el peligro de que los Macheteros realicen “actos terroristas en Puerto Rico: los supuesto blancos del ataque eran la Guardia Nacional y la Corte Federal. Por esta razón el organismo de seguridad realizó allanamientos, sin autorización previa, en las casas de los dirigentes relacionados al movimiento independentista.
Juan Dalmau, comisionado electoral del Partido Independentista Puertorriqueño, sostuvo que el hostigamiento de parte de FBI lo único que hizo fue incrementar el número de militantes en la lucha por la descolonización de la nación caribeña.
Por su parte, la líder nacionalista Lolita Lebrón sostuvo que “dentro de esta gloriosa fecha ha sucedido un asesinato que la historia de la humanidad lo recogerá para todos los siglos. Filiberto -Ojeda Ríos- reafirmó el Grito de Lares con el derramamiento de su sangre”.
A su vez advirtió que es necesario que “esos terroristas, ese imperio yanqui que nos quiere meter miedo, sepa que este pueblo no se rinde”.
Otro de los puntos salientes del acto del sábado fue la declaración Orlando González, militante de los Macheteros, quien denunció una persecución política de parte de los organismos de inteligencia norteamericanas. Además de contar que encontró un “rastreador” escondido en su automóvil, denunció que “miembros del grupo de teatro (que dirijo) se han quejado porque han sentido que sus teléfonos han sido intervenidos. Este caso demuestra que el FBI va a estar persiguiendo a grupos comunales, a grupos sindicales, no sólo a Los Macheteros... esto es mucho más amplio".
La ultima en tomar la palabra en Lares fue la presidenta del Partido Nacionalista Puertorriqueño, Rosa Meneses. Eufórica ante la magnitud de la convocatoria, la dirigente- haciendo alusión a la torrencial lluvia que caía en ese momento- señaló que “los cielos se abrieron y cayeron las lluvias que nos traen lágrimas de gozo, porque sabemos que la independencia y la libertad se acercan”.