Autor: Humberto Vargas Carbonell
Comienza a alborotarse el avispero electoral. Se acumula veneno en el aguijón de los avispones de siempre.
En Liberación Nacional, que más bien debía llamarse “Partido del Entreguismo Antinacional”, el pleito interno se recalienta, de una parte las nefastas ambiciones de Figueres Olsen y de la otra, la infinita megalomanía de Oscar Arias. A la par de ellos algunos subcandidatos, cada uno de los cuales es una ficha secundaria al servicio de alguno de los principales.
Se trata de candidatos—me refiero a los principales— que son reos impunes de graves violaciones a la legislación penal.
Se imaginan que una figura política de primer orden—Figueres Olsen--reciba de un monopolio extranjero la astronómica suma de 2.7 millones de dólares y logre escaparse a la acción legal de los tribunales. En espera de una posible prescripción de la acción penal se ausentó durante casi diez años, se puso al servicio del Foro de Davos, importante parroquia del brutal neoliberalismo, y que, con el descaro que cubre toda la vida electoral de nuestro país, pretenda ahora ser reelecto Presidente de la República. Lo escrito es apenas una pincelada de la biografía penal de José María Figueres Olsen.
En la trinchera de enfrente Oscar Arias, el mismo que declaró de utilidad pública la minería a cielo abierto, siendo que está expresamente prohibida por el Código de Minería. La prevaricación es clarísima pero es igualmente claro que para este personaje no existen el Ministerio Público y tampoco los Tribunales Penales. El decreto firmado por Oscar Arias, produjo enormes daños al medio ambiente. Este es también un boceto de la biografía penal de Oscar Arias Sánchez.
La vida de estos candidatos a candidatos sellan la esencia de lo que es hoy el Partido Liberación Nacional. El partido de la antipatria.
Todo pareciera indicar que estos señores, Figueres y Arias, no son los preferidos de la cúspide oligárquica que, tras bambalinas, es el gobierno real, el que toma las grandes decisiones y maneja los hilos del títere elegido.
Puesto que la crisis económica, fiscal y social se agudiza y se anuncia la posibilidad de otra de carácter internacional con su epicentro en Wall Street, la oligarquía aspira a un gobierno realmente fuerte, capaz de golpear aún con mayor fuerza al pueblo trabajador y a los sectores medios de la sociedad.
¿Qué hacer? Se preguntan los grandes ricos y los que le sirven.
Parece que su respuesta, por ahora, ha sido el planteamiento del diputado Otón Solís Fallas: un gobierno de unidad nacional. Significaría unir a todos o a un grupo importante de organizaciones electorales con un programa común y con una distribución equitativa de los puestos de la alta burocracia.
Este planteamiento es la sustitución, por otros medios, del bipartidismo, que fue la fórmula ideal para engañar al pueblo con una mascarada de falsa democracia electoral. Falsa porque cualquiera fuera el resultado numérico, el poder real se mantuvo en la cumbre oligárquica aliada al imperialismo.
Oscar Arias con la complicidad del entonces presidente Pacheco urdieron un plan para destruir a la Unidad Socialcristiana y ahora se percatan que esta acción fue un error político. Se les escocheró el juguete. La alternancia en el poder llegó a ser una opción antidemocrática para para alimentar el electorerismo. Es así como pudieron gobernar contra el pueblo y contra la patria dejando intacta la esperanza de que un nuevo gobierno sería capaz de enderezar los entuertos del anterior y así hasta el infinito. Resultó un juego macabro.
Después de la pírrica victoria del PAC no queda ninguna posibilidad de alternancia en el poder. Luis Guillermo Solís, seguramente por su acendrado liberacionismo fue absolutamente incapaz de hacer buenas sus palabras de campaña y condujo al partido que lo eligió al cadalso histórico.
En esencia el planteamiento de Ottón Solís es la sustitución del bipartidismo ya acabado, por un multipartidismo capaz de representar los intereses de la oligarquía apátrida y corrupta. Se trataría de un cambio de máscara y nada más
Hasta ahora la tesis del diputado Solís Fallas ha logrado el apoyo del Frente Amplio y de Oscar Arias, este último con algunas modificaciones.
Por su parte la cúpula dirigente del PLN se pronuncia por un “acuerdo” multipartidista pero ya, de inmediato, para utilizarlo como arma electoral. Piensan que el “programa de todos” podría ser la más eficaz cobertura para una posible candidatura de José Figueres Olsen. Una útil máscara tras la cual esconder las culpas y las falencias del candidato.
El secretario del PLN deja clara la posición de la tendencia Figuerista. Escribe en La Nación (30 de agosto 2016): “El tercer elemento en el cual difiero con Ottón radica en el hecho de que su propuesta implica la necesidad de un gobierno integrado por todos los partidos, cuando lo esencial del asunto es ponernos de acuerdo en la receta, y no enfocarnos en los cocineros”.
Los costarricenses conscientes y patriotas conocen bien la receta liberacionista, sin importar quien sea su candidato: engaño hoy, palo y corrupción mañana.
En síntesis: nos dan la receta, con ella engañamos a los costarricenses y luego, desde el gobierno, haremos lo que nos venga en gana, como ha sido siempre.
Los programas de gobierno de los partidos oligárquicos valen menos que el papel en que están escritos. Esa es la historia real de la política burguesa, al menos desde el golpe de Estado contra el gobierno de Teodoro Picado hasta nuestros días.
Seguiremos examinando estos problemas políticos y electorales.
Seguiremos trabajando por la unidad popular, la unidad de las bases, sin hegemonismo y con absoluta tolerancia y respeto.
Ese es el impulso necesario para saltar la cerca que separa a la justicia social, a la libertad de organización y al patriotismo de la injusticia social y del entreguismo.
No soy creyente, todo el mundo lo sabe. Pero me interesa la religión como fenómeno histórico y social. Por eso en la medida de mis posibilidades he tratado de conocer los principales libros de todas las religiones. En la Biblia he encontrado mensajes que, condenan con fuerza y hasta violencia a los hipócritas. Las campañas electorales de la burguesía pueden considerarse, con justa razón, el reino inicuo de los hipócritas. Hace apenas unos días presencie las “convenciones” de los grandes partidos gringos y, en esencia, son iguales a las que se realizan en nuestro país.
La lógica elemental nos enseña que la burguesía explotadora para someter al pueblo trabajador obligatoriamente debe utilizar la falsedad, el engaño, la mentira y la hipocresía. Jamás podrán ser limpios y sinceros; saben bien que esto sería un suicidio político.
Sobre este tema me parece oportuno copiar unas líneas del evangelio de Mateo en que condena y acusa a los hipócritas.
El texto tiene plena vigencia hoy, cuando es absolutamente necesario denunciar a los falsarios e hipócritas. Hacerlo es un imperativo ético.
Copio de Mateo 23.
24. ¡Guías ciegos, que coláis el mosquito, y tragáis el camello!
25. ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque limpiáis lo de afuera del vaso y del plato, pero por dentro estáis llenos de robo y de injusticia.
26.¡Fariseo ciego! Limpia primero lo de dentro del vaso y del plato, para que también lo fuera sea limpio.
27. ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, porque por fuera, a la verdad, se muestran hermosos, mas por dentro están llenos de huesos muertos y de toda inmundicia.
28. Así también vosotros por fuera, a la verdad, os mostráis justos a los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía e iniquidad
Fuente: CALUFA/PrensaPopularSolidaria
http://prensapopular-comunistasmiranda.blogspot.com
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