Ciertamente el Comité Central ha mostrado señales de desacuerdo con las políticas social-demócratas implementadas por el partido de gobierno. Basta con echar una mirada a su órgano comunicacional Tribuna Popular para darnos cuenta, pero esto no ha dado ningún resultado ante la crisis que vive el país, sobre todo cuando cada elección a cargos de poder se utiliza como válvula de escape a una ebullición que con medidas revisionistas o reformistas no pueden ser solucionadas por ser inviables y carecer de elementos de justicia, igualdad e integridad. |
Por Ervin Sánchez
Esta posición se ratifica a cada momento, ante las embestidas irracionales del Gobierno Estadounidense que encuentra en las organizaciones internacionales como la ONU, OEA y en una derecha venezolana como parte de la pequeña burguesía, fieles sirvientes a sus propósitos carroñeros de apropiarse de nuestros apreciados recursos; tal como ahora utilizan la táctica conocida del canal humanitario para invadir legalmente a Venezuela con excusas nada creíbles de buena fe. Proceder que ha sido antesala del Departamento de Estado Norteamericano en todas las invasiones militares que ha promovido en franca y abierta ambición de dominar al mundo, dejando como resultado naciones saqueadas, no solo económicamente, sino cultural y humanamente dejando millones de muertos a su paso.
Esta posición se ratifica a cada momento, ante las embestidas irracionales del Gobierno Estadounidense que encuentra en las organizaciones internacionales como la ONU, OEA y en una derecha venezolana como parte de la pequeña burguesía, fieles sirvientes a sus propósitos carroñeros de apropiarse de nuestros apreciados recursos; tal como ahora utilizan la táctica conocida del canal humanitario para invadir legalmente a Venezuela con excusas nada creíbles de buena fe. Proceder que ha sido antesala del Departamento de Estado Norteamericano en todas las invasiones militares que ha promovido en franca y abierta ambición de dominar al mundo, dejando como resultado naciones saqueadas, no solo económicamente, sino cultural y humanamente dejando millones de muertos a su paso.
Por otro lado esta cohesión de las fuerzas revolucionarias, no es similar ante una segunda prioridad que defienden los comunistas. No existe un compromiso más allá del discurso en crear un verdadero y único camino en la construcción de una revolución socialista partiendo de las concepciones que nos brinda el Marxismo-leninismo.
A diecinueve años, aun no se camina en la intención de realizar las transformaciones al sistema, se rehúsa -como ejemplo- a crearse los instrumentos que faciliten a la clase trabajadora alcanzar su conciencia de clase, que le permitan cumplir en la realidad su papel histórico, como es la gestión directa y decisiva de los medios de producción. En contra parte, cada vez más, se incrementa la existencia de entidades gubernamentales que truncan la mínima elevación de las masas populares al poder, siendo supeditadas por el Estado Capitalista, dominado éste, por la otra parte, por la directa influencia de la pequeña burguesía Venezolana.
Esa unidad teórica en defensa de la Liberación Nacional, no existe cuando se trata de la construcción del socialismo científico en la Venezuela interna. Esto tiene su razón de ser por cuanto lo que se conoce como la “izquierda Venezolana”, resulta un espacio suficientemente amplio pequeñoburgués donde convergen organizaciones, progresistas, social demócratas y nacionalistas, todas ellas movidas por los motores del revisionismo y el reformismo. Espacio donde, necesariamente, junto con, y por razones estratégicas, los comunistas han hecho vida activa en alianzas, generalmente no concretadas en la realidad, procurando, por supuesto, de no perder su esencia como partido de vanguardia de la clase obrera, evitando caer en la conclusión de que los tiempos son ahora solamente para tácticas electorales.