El pueblo portugués salió otra vez a las calles en una protesta contrael Gobierno SócratesMas de 200.000 personas según la policía -250.000 en la evaluación de algunos medios– marcharon por la Avenida de la Libertad en Lisboa durante dos horas y media para condenar la tentativa de imponer al pueblo un Código de Trabajo de matices fascistas.
La respuesta del Poder al NO de los trabajadores del sector privado y de la Administración Pública fue arrogante. Jose Sócrates declaró que no le interesan los números, eufemismo utilizado para repetir que ignora la voluntad del pueblo, presentándose como salvador de la patria, benefactor de trabajadores ingratos.
Ese discurso que por el tono y estilo trae a la memoria, en un contexto diferente, el de los epígonos del fascismo, no cambia la realidad ni el rumbo de la Historia.
La manifestación del 5 de junio señala una radicalización de la lucha del pueblo portugués contra la política de derecha desarrollada por el gobierno mas reaccionario de cuantos Portugal ha conocido después del 25 de Abril.
Esa disponibilidad para el combate en defensa de derechos y libertades garantizados por la Constitución de la República fue transparente en la atmósfera de la jornada, en la confianza de la masa, en el ambiente de fraternidad que la caracterizó. Palabras de orden que hace mucho no se escuchaban volvieron a las calles, advirtiendo al gobierno que el pueblo unido no puede ser vencido.
El próximo día 28 centenas de miles de trabajadores volverán a manifestarse contra el gobierno de Sócrates. Ese día será en decenas de ciudades del país, de Minho a Algarve, para significar con claridad el rechazo a una política que promueve y amplía la desigualdad social, rechazo que asume dimensión nacional.
Las cosas no pueden continuar como están.
Fuente: Kaosenlared
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