Por : Jerónimo Carrera
“Un fantasma recorre.. Con estas premonitorias palabras –lo digo para quienes todavía no hayan podido leerlo- comenzaron los entonces jóvenes y ya sabios Marx y Engels su incomparable Manifiesto del Partido Comunista, en el año 1848. A lo cual ellos añadieron en tan breve frase sólo esto: Europa: el fantasma del comunismo”. Hoy podrían ser acusados de eurocentrismo, sin duda.
Es un fantasma que para aquella época iniciaba su recorrido en el continente europeo, pero que luego lo ha hecho y lo continúa en nuestros días, aunque con ostensible menor éxito, por todas las muy diversas partes de nuestro planeta.
Esta reflexión me viene a la mente de inmediato al empezar a leer la obra “Historia de las ideas anticomunistas”, un importante trabajo de investigación de nuestro camarada y amigo Luis Cipriano Rodríguez, profesor universitario venezolano de larga y amplia trayectoria. Está editado por el Fondo Editorial IPASME, en Caracas, prestigiosa y muy importante institución, en cuyo Comité Editorial figuran entre otros los profesores José Gregorio Linares y Nelly Montero. En total son 260 páginas, y esta primera edición es de mayo del 2010, es decir, está recién salida del horno.
A primera vista sorprende lo extensa de la labor de investigación realizada para merecer tal título, por lo tanto es conveniente que se aclare el alcance mismo que tiene, y es de índole venezolana en lo fundamental, y cubre sólo los comienzos del siglo pasado. Pienso que es una valiosa contribución al estudio de la vida política acá en Venezuela, y en especial de su prensa, pues la investigación es en lo fundamental hemerográfica. Cubre tanto los periódicos de Caracas como del interior del país, así como publicaciones diversas, y pone de un primer plano las deficiencias informativas de aquella época.
El anticomunismo de entonces tenía ya los mismos elementos que se notan en el anticomunismo actual, que están en la base económica de una sociedad. Emanan de la propiedad privada de los diferentes medios de producción, lo cual genera una inevitable lucha de clases, a veces enmascarada por ciertas fuerzas de izquierda que por lo común se dan el título de socialistas.
A lo cual se ha añadido el estricto control de la información por el gran capital, desde luego, y eso explica el virulento brote del anticomunismo en los últimos tiempos.
No puedo dejar de felicitar a Luis Cipriano, por su valentía personal cuando ha llevado a cabo tan necesaria labor de denuncia, y también me permito repetir ahora lo que he dicho otras veces, que lo considero a él un auténtico animal raro, por ser como un animal de tres patas, igual a como lo dice ser nuestro actual presidente de la república: cristiano, bolivariano y marxista.
Sabido es que muchos de los seres vivientes por lo normal tenemos dos patas, según lo explica precisamente Engels al escribir sobre la transformación del mono en hombre. O cuatro patas que es lo más corriente. Pero ya alguien nos observará que el ciempiés y el alacrán escapan a esa regla. Y también nos pueden decir que las serpientes no tienen ninguna pata. O sea que toda regla tiene su excepción. Y que no se disgusten ciertos amigos por lo que estoy diciendo, aunque como comunista yo pienso que soy sólo de dos patas…
Pues bien, espero en mi próxima OPTICA poder analizar un poco los rasgos del anticomunismo de hoy, especialmente en nuestra Venezuela, donde parecería ser el principal tema que nos divide en general a los venezolanos, siguiendo también en esto los lineamientos trazados por los especialistas de Washington. Para ponernos a pelear entre nosotros y así poder implementar lo que su clásico semanario The Nation (del 8-2-2010) ha bautizado con el nombre de “La nueva Doctrina Monroe del Pentágono”.
Fuente: PrensaPopularSolidaria
http://prensapopular-comunistasmiranda.blogspot.com/
Correo: pcvmirandasrp@gmail.com
“Un fantasma recorre.. Con estas premonitorias palabras –lo digo para quienes todavía no hayan podido leerlo- comenzaron los entonces jóvenes y ya sabios Marx y Engels su incomparable Manifiesto del Partido Comunista, en el año 1848. A lo cual ellos añadieron en tan breve frase sólo esto: Europa: el fantasma del comunismo”. Hoy podrían ser acusados de eurocentrismo, sin duda.
Es un fantasma que para aquella época iniciaba su recorrido en el continente europeo, pero que luego lo ha hecho y lo continúa en nuestros días, aunque con ostensible menor éxito, por todas las muy diversas partes de nuestro planeta.
Esta reflexión me viene a la mente de inmediato al empezar a leer la obra “Historia de las ideas anticomunistas”, un importante trabajo de investigación de nuestro camarada y amigo Luis Cipriano Rodríguez, profesor universitario venezolano de larga y amplia trayectoria. Está editado por el Fondo Editorial IPASME, en Caracas, prestigiosa y muy importante institución, en cuyo Comité Editorial figuran entre otros los profesores José Gregorio Linares y Nelly Montero. En total son 260 páginas, y esta primera edición es de mayo del 2010, es decir, está recién salida del horno.
A primera vista sorprende lo extensa de la labor de investigación realizada para merecer tal título, por lo tanto es conveniente que se aclare el alcance mismo que tiene, y es de índole venezolana en lo fundamental, y cubre sólo los comienzos del siglo pasado. Pienso que es una valiosa contribución al estudio de la vida política acá en Venezuela, y en especial de su prensa, pues la investigación es en lo fundamental hemerográfica. Cubre tanto los periódicos de Caracas como del interior del país, así como publicaciones diversas, y pone de un primer plano las deficiencias informativas de aquella época.
El anticomunismo de entonces tenía ya los mismos elementos que se notan en el anticomunismo actual, que están en la base económica de una sociedad. Emanan de la propiedad privada de los diferentes medios de producción, lo cual genera una inevitable lucha de clases, a veces enmascarada por ciertas fuerzas de izquierda que por lo común se dan el título de socialistas.
A lo cual se ha añadido el estricto control de la información por el gran capital, desde luego, y eso explica el virulento brote del anticomunismo en los últimos tiempos.
No puedo dejar de felicitar a Luis Cipriano, por su valentía personal cuando ha llevado a cabo tan necesaria labor de denuncia, y también me permito repetir ahora lo que he dicho otras veces, que lo considero a él un auténtico animal raro, por ser como un animal de tres patas, igual a como lo dice ser nuestro actual presidente de la república: cristiano, bolivariano y marxista.
Sabido es que muchos de los seres vivientes por lo normal tenemos dos patas, según lo explica precisamente Engels al escribir sobre la transformación del mono en hombre. O cuatro patas que es lo más corriente. Pero ya alguien nos observará que el ciempiés y el alacrán escapan a esa regla. Y también nos pueden decir que las serpientes no tienen ninguna pata. O sea que toda regla tiene su excepción. Y que no se disgusten ciertos amigos por lo que estoy diciendo, aunque como comunista yo pienso que soy sólo de dos patas…
Pues bien, espero en mi próxima OPTICA poder analizar un poco los rasgos del anticomunismo de hoy, especialmente en nuestra Venezuela, donde parecería ser el principal tema que nos divide en general a los venezolanos, siguiendo también en esto los lineamientos trazados por los especialistas de Washington. Para ponernos a pelear entre nosotros y así poder implementar lo que su clásico semanario The Nation (del 8-2-2010) ha bautizado con el nombre de “La nueva Doctrina Monroe del Pentágono”.
Fuente: PrensaPopularSolidaria
http://prensapopular-comunistasmiranda.blogspot.com/
Correo: pcvmirandasrp@gmail.com
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