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| Libia, levántate, une a tu pueblo, haz morder el polvo de la derrota al imperialismo yanqui que te quiere dividir. | 
Humberto Gòmez Garcìa
Trinchera de Ideas
Trinchera de Ideas
Las
 razones de la insurrección del hambre y la pobreza en Túnez o Egipto 
difieren de las de Libia. La problemática Libia es de otra naturaleza, 
de la complejidad de su conformación como nación.
Ni
 siquiera en los tiempos del sátrapa y criminal de guerra George Bush se
 había desatado una campaña tan falaz, mentirosa, cobarde, ruin como la 
desatada por el gobierno imperialista norteamericano y el complejo 
mundial mediático que controla, y los gobiernos de la UE contra un país y
 una nación como lo vienen haciendo desde hace unas tres semanas contra 
Libia y el presidente Gaddafi. Nada ha sido más burdo, ni siquiera el 
ansia ingerencista, colonialista de los gobernantes norteamericanos; 
cínicos hasta más no poder en sus ambiciones, hablan públicamente de sus
 contactos abiertos con una oposición monárquica, a quien aúpan y apoyan
 de manera descarada, sin recato alguno.
El
 presidente Obama –casi clandestino en su gestión–, la cancillera 
Clinton –quién lleva la voz cantante del gris y opaco gobierno–, pero 
sobre todo el complejo militar industrial y las compañías petroleras se 
frotan las manos por el pingüe negocio que significaría meterle la mano 
al petróleo libio. Porque ese -¿a qué dudarlo? – es el objetivo de este 
divisionismo, de partir a Libia en por lo menos tres pedazos y 
repartirla para explotarla mejor.
Ya
 la insurrección popular en Túnez y Egipto, las revueltas en el Yemen o 
en otras naciones, reinados, emiratos, califatos dejaron de ser noticias
 para las agencias internacionales de noticias manejadas y controladas 
–y eso hay que remarcarlo y denunciarlo permanentemente– en primer lugar
 por el imperialismo norteamericano y sus secuaces europeos. La noticia 
fabricada, inventada; las matrices de opinión se refieren a masacres 
como la ocurrida en Trípoli ordenada por Gaddafi, masacre que nunca 
existió. O un bombardeo en el barrio de Fascilum, de Trípoli, que nunca 
se produjo. O las fosas comunes con fotos trucadas, en Tadjoura, 
suburbio de Trípoli donde supuestamente se encuentra dicha fosa común. 
Allí lo que existe es en realidad un cementerio que siempre ha existido.
 Tampoco los rebeldes anti Gaddafi nunca conquistaron el aeropuerto 
militar de Mitigar.
¿Por qué esa campaña de mentiras y desinformación tan atroz e implacable?
Además
 de lo ya dicho de la ansiedad por poseer y controlar el petróleo libio,
 un decadente imperio que vive su peor e irreversible crisis económica, 
que ya no controla el mundo como antes, tiene su burguesía, sus 
transnacionales que borrar de la faz del mundo árabe el ejemplo que ha 
significado la revolución social en Libia donde se ha construido un 
poder popular. Ningún país del Norte de África puede exhibir los niveles
 de desarrollo alcanzados por el pueblo libio ni han alcanzado su 
estándar de vida.
Las
 razones de la insurrección del hambre y la pobreza en Túnez o Egipto 
difieren diametralmente de las de Libia. La problemática Libia es de 
otra naturaleza, de la complejidad de su conformación como nación. Los 
avances y las conquistas logradas por ese gran pueblo en 40 años de 
proceso revolucionario no pueden tirarse al cesto de la basura, ese es 
un error histórico imperdonable, un inadmisible retroceso, como lo es el
 pretender volver a la monarquía que murió hace cuatro décadas.
Corresponde
 al pueblo libio buscar las salidas, en paz, a su crisis interior, sin 
injerencias, sin las provocaciones del extremismo, de la CIA, del 
Mossad, del imperialismo yanqui, del sionismo criminal, de los 
imperialistas europeos. La unidad de todo el pueblo libio –es elemental 
pensarlo– es la garantía de la victoria ante la adversidad, las 
agresiones internas y externas. Los asuntos internos de Libia sólo 
corresponden a los libios, a ese pueblo de guerreros, buscarle una 
solución armoniosa. El problema no es Gaddafi, él es sólo un símbolo, un
 gran líder que no es eterno, que ha cometido errores y se ha confiado 
demasiados en aquellas naciones imperiales que hoy quieren derrocarlo, 
el problema, lo repito, es la revolución, sus conquistas y avances. Si 
Libia cae las hienas van a querer destrozarlo, todo habrá fracasado y el
 esfuerzo de un pueblo se habrá perdido por siglos.
Ya
 el imperio yanqui asomó sus garras al mover sus naves de guerra a las 
costas de Libia. Como no puede acusar a Gaddafi de tener armas de 
destrucción masiva como pretexto para invadir Libia, utiliza las armas 
letales y destructivas de la desinformación, de la mentira en gran 
escala a nivel mundial para ablandar a la opinión pública del orbe, 
generar confusión y así poder agredir militarmente –con el apoyo 
incondicional del sionismo israelita– al país, proyecto largamente 
acariciado por los imperios de Europa y de Norteamérica. 
Para
 eso, piensan los revolucionarios del mundo, se debe estar preparando 
Gaddfi, el gobierno y el pueblo. Una invasión militar es una carta de 
demasiado riesgo, eso también lo sabe el imperio, La estrategia sería 
desembarcar en aquellas zonas supuestamente en manos de la oposición 
monárquica para, a partir de allí, no sólo comenzar a controlar el flujo
 petrolero hacia Europa, sino utilizar ese escudo humano para avanzar 
sobre Trípoli y otras importantes ciudades leales a la revolución. 
¿Qué
 va a pasar en la zona, con las naciones amigas de Libia, las que 
sufrirían los efectos devastadores de una guerra relámpago imperialista,
 sólo serán espectadores viendo ante sus ojos, esta vez sí, una 
descomunal masacre o defenderán a Libia?
Por
 supuesto, los precios del petróleo se dispararán por encima de los 200 
dólares, precisamente por allí viene la maniobra inglesa cuando su 
ministro de relaciones exteriores, comenzando la crisis en Libia, lanzó 
la mentira de que Gaddafi iba rumbo a Venezuela en busca de asilo. El 
inglés sabía la mentira porque está metido en la conspiración y trataron
 de hacer un juego típico del capitalismo, crear una falsa crisis para 
que los precios del crudo se elevaran porque, en el marco de su aguda 
crisis económica, eso le convenía el alza del crudo Brent del Norte, 
como le conviene toda esa crisis creada en Libia. No nos extrañe que si 
al final el ejército norteamericano se lanza por el despeñadero de una 
invasión a Libia, cuente con el apoyo solícito y sumiso de los 
gobernantes ingleses, como lo tuvo en la invasión a Irak o a Afganistán.
Jamás
 imaginamos al pueblo libio rendido, dándole loas a los invasores, 
permitiendo la partición del sagrado suelo de la patria en tres o más 
pedazos, volver al colonialismo, a una monarquía de cartón y a un sector
 de la población apoyando aquella barbaridad, burdas marionetas de los 
criminales ejércitos imperiales para guardar las apariencias. 
Imaginamos, sí, a un pueblo bravío, dando la batalla, haciendo morder el
 polvo de la derrota a los invasores, peleando por cada metro del país, 
no cediendo ni un ápice de dignidad. 
Que
 se remoce el nacionalismo y el socialismo árabe, el ideario nasserista 
de los años 50, el ideario del poder popular. Las masas árabes ya se han
 rebelado, ni los tunecinos, ni los egipcios, ni los yemenitas van a 
dejar solo al pueblo libio ante la agresión yanqui/europea/sionista. Los
 vientos soplan a favor de las mayorías árabes, de la justicia, de la 
libertad, de los derechos conculcados a pueblos sedientos de 
participación, como una vez dijo la II Declaración de La Habana, ese 
pueblo ya ha echado a andar y su marcha de gigantes no se detendrá hasta
 alcanzar su verdadera y definitiva independencia.
¡Viva
 el pueblo libio! ¡Viva la nación Libia, unida y sin divisiones 
imperialistas! ¡Viva la revolución y las conquistas del socialismo 
libio!
Fuente: Trinchera de Ideas(Partido Comunista de El Salvador_PCS/PrensaPopularSolidaria
http://prensapopular-comunistasmiranda.blogspot.com
Correo: pcvmirandasrp@gmail.com
Fuente: Trinchera de Ideas(Partido Comunista de El Salvador_PCS/PrensaPopularSolidaria
http://prensapopular-comunistasmiranda.blogspot.com
Correo: pcvmirandasrp@gmail.com
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
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